Redacción La Jornada
México. México ocupa el quinto lugar en megadiversidad con sus cerca de 30 mil especies de plantas, pero 46% está en peligro de extinción, según datos de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), dijo Víctor Manuel Chávez Ávila.
El especialista y responsable del Laboratorio de Cultivo de Tejidos Vegetales del Jardín Botánico de la UNAM, advirtió que la situación es alarmante, “con cerca de mil especies vegetales extinguidas al año (en promedio tres al día)”.
Esa cifra “refleja una indolencia generalizada que nos lleva a minimizar la importancia de otros organismos y a explotarlos irreflexivamente”, explicó en un comunicado de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Sostuvo que esa explotación ocurre “sin atender las consideraciones de los expertos en la materia ni buscar la armonía con el ambiente, pero sí con el afán de obtener beneficios económicos”.
El investigador del Instituto de Biología enfatizó que ante esta situación es alarmante de devastación “las técnicas biotecnológicas in vitro han demostrado utilidad para micropropagar y conservar especies amenazadas”.
Chávez Ávila se ha dedicado a la investigación de especies mexicanas en peligro de extinción, y junto con Richard E. Litz, de la Universidad de Florida, ha logrado que el laboratorio del Jardín Botánico sea, hasta ahora, el único sitio en el mundo que ha logrado generar embriones somáticos.
Toman este nombre por proceder de estructuras del cuerpo de las plantas, de cícadas a partir de hojas de individuos adultos, por lo que “hoy mantenemos in vitro más de 90 distintas especies mexicanas en peligro de extinción, como estrategia para conservarlas”.
Esta técnica en el laboratorio ha permitido propagar especies amenazadas con tal éxito que se considera que su labor es un seguro contra la extinción total de algunas de ellas, pero el gran enemigo es el humano, como ocurre con la extracción de plantas con alto valor en el mercado.
Chávez Ávila expuso que la gran interrogante ante estas actitudes depredadoras es “¿para qué hurtar de esta manera y lacerar si tenemos la capacidad tecnológica de producir estos organismos?”.