México, 11 de abril 2017 (NOTIGODÍNEZ).- Javier Corral Jurado, «gobernador» panista de Chihuahua, es propietario de una lujosa cabaña dentro de un área natural protegida en la zona tarahumara del Estado, denunciaron integrantes del Consejo Supremo de la Sierra Tarahumara.
De acuerdo con el diario El Universal, la propiedad de Corral está ubicada «en una de las mejores vistas de la Sierra Madre Occidental, entre montañas y una cascada», al interior de la zona que se declaró como natural protegida en 1981.
En su declaración «3de3», presentada en mayo del año pasado, el propio sujeto confirmó que es poseedor de 300 metros de terreno en el sitio, pese a que existe un decreto de Parque Nacional Cascada de Basaseachi, en el municipio de Ocampo, que establece el área como protegida.
Asimismo, la comunidad indígena tarahumara denunció que el «gobernador» es propietario de 700 metros de terreno y no de los 300 que indicó en su declaración patrimonial.
El Universal detalló que el predio con la cabaña se encuentra a tres horas de la capital chihuahuense, esto es, unos 250 kilómetros de distancia, en uno de los sitios turísticos más destacados de la zona tarahumara.
La cabaña de Corral forma parte de un complejo exclusivo construido en 1997 por un tal Víctor Rodríguez Guajardo, según los registros. Desde entonces, los indígenas tarahumaras denunciaron que el complejo se construyó en predios irregulares en zonas protegidas.
En 2002, el panista compró parte del terreno a Rodríguez Guajardo. Ahí, Corral organiza reuniones, fiestas y francachelas con sus amigos y colaboradores. El Universal reseñó varios de estos encuentros documentados incluso en video.
Entrevistado por el citado medio, Enoé Carrasco Jordán, secretario de organización y desarrollo del Consejo Supremo de la Sierra Tarahumara, denunció que personalmente ha exigido la devolución del predio a Corral, pero que éste le ha respondido «con actitudes muy feas» y que ahora, como «gobernador», es mucho más inaccesible, «una persona caprichosa y terca».
“Sabemos que no vamos a poder con él, habrá cacería de brujas, mientras en la sierra hay hambre y falta medicamento. Esa cabaña es su área de descanso a sabiendas que es una ilegalidad. Mientras tanto, no se da cuenta de lo que pasa en su administración, en seguridad pública, con las comunidades indígenas, la falta de alimento, en el sector salud, el educativo”, lamentó.
En tal sentido, adelantó que la comunidad tarahumara seguirá luchando para recuperar esos predios. “Es invaluable la importancia ambiental, puesto que contribuye a controlar y mantener el equilibrio ecológico en la región”.
Con información y foto de El Universal