Roxana Aguirre
La Jornada
Veracruz, Ver.- El viacrucis que empezó Esteban Gonzaga Valdés cuando se enterró unos clavos oxidados en un pie la mañana del domingo no ha terminado, continúa al recorrer todos los centros de Salud en búsqueda de la vacuna del tétano sin éxito.
La penúltima parada fue la Jurisdicción Sanitaria (JS) número 8, donde le indicaron que era en el centro de Salud ubicado a un costado del Club de Leones donde encontraría tan ansiada vacuna que debió ponerse en las primeras 24 horas del accidente, sin embargo ya estaba llegando al límite de tiempo.
“Desde ayer comencé a buscar la vacuna antitetánica y no la tienen, fui a Cruz Roja y pregunté en farmacias y resulta que sólo en Sector Salud; fui al de Virgilio Urbe, hablé a Jurisdicción Sanitaria y me dijeron que allí la tienen pero no, hay desabasto”, explicó.
Este es sólo uno de los casos que se presentan día tras día en los centros de Salud de Veracruz, ahora Gonzaga Valdés deberá erogar una cantidad de dinero, con la que no contaba, para poder adquirir en algún laboratorio particular la tan ansiada vacuna.
El estado del centro de Salud Club de Leones es deplorable, las oscuras manchas de la humedad salen desde las esquinas de las paredes y trepan hasta alcanzar el muro más cercano, las esquinas de los mini splits y todo aquello que tenga agua.
Hay algunas áreas en las que la pintura se ha descarapelado y deja tras de sí el cemento desnudo desde donde gotea el agua, ha sido un día lluvioso en el puerto de Veracruz, por lo que tuvieron que improvisar varios recipientes para contener el agua que se precipita al interior del inmueble.
Los trabajadores denunciaron que en Veracruz los Centros de Salud más afectados además de ese son el número 3 ubicado en la colonia 21 de abril, el de la reserva Tarimoya y el número 4 que se encuentra en Nezahualcóyotl y Cortés, y que es el más antiguo de Veracruz.
Adelaida Ramírez Rojas, que hasta hace un par de días era la jefa del centro de Salud, expresó que no han recibido mantenimiento desde hace dos años, por lo que la situación se está complicando cada vez más.
“Todas las carencias que vemos, estamos pidiendo que se vea impermeabilización, pintura, tenemos con las lluvias goteras, nuestro sillón dental es nuevo pero no sirve, los climas están goteando, en la entrada es triste que nuestros pacientes puedan caerse, tenemos agua y los pone en riesgo, lo único que solicitamos es una voz generalizada de los compañeros de que se nos den las condiciones necesarias para atender a los pacientes”, explicó.
El sillón para dar atención odontológica tampoco funciona, sólo sirve la mesa para colocar el instrumental, por lo que los dentistas se limitan a hacer extracciones, cualquier otro tratamiento queda fuera del alcance.
Ante la denuncia de la falta de medicamentos y vacunas, la doctora indicó que el viernes les enviaron una caja con medicina, sin embargo varias claves de la farmacia siguen sin ser cubiertas.
“Se utilizan más las de crónicos e hipertensivos, algunas nos mandan pero se acaban, se piden a través de un documento las que más necesitamos, se piden y nos otorgan menos de las que pedimos y así es hasta donde llegamos, los pacientes nos echan más leña por la inconformidad que sienten”, comentó.
Las 25 personas que laboran en el centro de Salud, entre médicos, vacunadores, enfermeras y promotores deben realizar la labor en esas condiciones y argumentan haber buscado la forma de arreglar la situación por sí mismos sin éxito.