México, 11 de febrero 2016 (NOTIGODÍNEZ).- Una mujer de 24 años fue asesinada por su pareja en la delegación Iztapalapa, luego de que ella lo denunciara en un par de ocasiones por violencia y golpizas en su contra, sin que las «autoridades» capitalinas tomaran cartas en el asunto.
De acuerdo con el diario Reforma, Julieta Paola Suaste Hurtado, madre de dos niños de 5 y 3 años, denunció ante el ministerio público en dos ocasiones a su concubino de nombre Sergio Mauricio, por maltrato físico y psicológico. Sin embargo, las «autoridades» no procedieron y el sujeto la estranguló y posteriormente abandonó ya muerta en un predio de Tláhuac.
Según el mencionado rotativo, que cita a su vez testimonios de los conocidos de la víctima, Julieta era «muy noble y paciente» con su pareja, razón por la cual soportó por mucho tiempo los abusos del sujeto. Sin embargo, se hartó y lo denunció en un par de ocasiones como consta en las averiguaciones previas FIZP/IZP-8/T1/1999/15-08 y FTH/TLH-1//T2/1144/15-08.
José Luis Suaste, padre de la joven asesinada, señaló que la Procuraduría General de Justicia capitalina no procedió en contra de Sergio Mauricio, pese a que en la segunda denuncia Julieta mostró evidencia de los golpes que recibió, e incluso se presentó ante el ministerio público portando un collarín en el cuello.
Detalla Reforma que el 15 de agosto de 2015, la joven salió con cuatro amigas a una fiesta muy cerca de su domcilio ubicado en la delegación Iztapalapa. Las acompañantes de la occisa señalaron que Julieta acudió a la fiesta porque ya había decidido abandonar a su violento concubino. Más tarde, alrededor de las 4:17 horas, Julieta emprendió el regreso acompañada de sus amigas a bordo de un taxi.
Sin embargo, ya no se supo nada de Julieta luego de que bajara del vehículo. Cuando sus padres comenzaron a buscarla, Sergio Mauricio les dijo que nunca regresó. Posteriormente se contradijo y declaró que la joven sí había regresado pero «a casa de su tía».
No obstante, la tía desmintió al sujeto y aseguró que Julieta no había pasado la noche con ella. Durante la búsqueda de la joven, peritos hallaron la chamarra que usó en la fiesta en la habitación donde dormía con Sergio.
Las «autoridades» demoraron ocho días en abrir la investigación para buscar a la joven, alegando que «sólo su pareja podía presentar la denuncia de desaparición». Así, los padres estuvieron nueve días sin saber de su hija.
Finalmente, el 24 de agosto, fue hallado el cadáver de Julieta con signos de estrangulación, abandonado en un predio en la delegación Tláhuac.
Y fue apenas a principios de este año que la procuraduría emitió una orden de localización y presentación contra el concubino, quien abandonó a sus hijos y cuyo paradero se desconoce desde entonces.
Con información de Reforma