México, 4 de noviembre 2015 (NOTIGODÍNEZ).- El «Partido Revolucionario Institucional» (PRI) en Veracruz, aplicará pruebas de embarazo a sus féminas militantes que aspiren a algún puesto de elección popular, para registrarse como precandidatas en el proceso electoral 2016 y «transparentar su perfil ante la ciudadanía».
De acuerdo con el líder estatal de ese «partido», Alberto Silva Ramos, el «nuevo» PRI buscará a «los mejores candidatos» de cara a las próximas elecciones para renovar la gubernatura y 50 diputaciones locales.
Por ello, el sujeto advirtió que impondrá a los aspirantes a las candidaturas pruebas de antidoping y de «antiembarazo» –así dijo textualmente–, para elegir a los «mejores abanderados del PRI» y que la ciudadanía sepa con qué cuentan sus aspirantes y les tenga más confianza.
«Podemos hacer las pruebas antidoping, antiembarazo [sic] y que sirva para transparentar y que la ciudadanía tenga confianza, me parece que son nuevos tiempos, porque la ciudadanía quiere conocer de viva voz con lo que cuenta un aspirante a gobernar Veracruz o su representante popular», declaró citado por el portal El Financiero.
De esta manera, según el citado medio, el PRI viola por enésima vez las leyes mexicanas, al discriminar ahora a las mujeres en estado de embarazo que aspiren a algún cargo de elección popular, lo que está prohibido en la Ley General para el Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.
La presidenta del Colectivo de Información y Desarrollo Entre Mujeres (CIDEM), Mayela García, calificó de misoginas tales declaraciones y expresó que aún si el cobarde sujeto pretextara que se trató de una «broma», el hecho por sí mismo es un acto de discriminación.
«Es ridículo, eso no procede no te lo pueden pedir, de ninguna manera, bajo ninguna circunstancia, ameritaria discriminación, (…) es directa y franca discriminación misogina», denunció citada por El Financiero.
Ahí tienen a su «nuevo» PRI de siempre. ¿A alguien le sorprende? En realidad lo sorprendente es que el pueblo haya mantenido por casi 100 años –y lo siga haciendo– a semejantes delincuentes en el poder.
Con información de El Financiero