Redacción La Jornada
Un puesto de mariscos en el municipio de Jalostotitlán que comercializaba huevos de tortuga de la especie Golfina (Lepidochelys olivácea), fue clausurado por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) donde además una persona fue remitida al Ministerio Público Federal (MPF).
El hecho ocurrió después de que personal de la delegación federal de la Profepa en la entidad, con apoyo de un agente del Ministerio Público de la Procuraduría General de la Republica (PGR) adscrito al municipio de Tepatitlán, realizaban acciones de inspección y vigilancia.
En el puesto, se encontraron 65 huevos de tortuga Golfina, especie enlistada en la NOM-059-SEMARNAT-2010, en la categoría de Peligro de Extinción, los cuales se ofertaban para consumo de los clientes del lugar, mismos que fueron asegurados por los inspectores de la Profepa.
El puesto se clausuró conforme al Código Penal federal que establece que se impondrá pena de uno a nueve años de prisión y por el equivalente de 300 a 3 mil días de multa a quien ilícitamente capture, dañe o prive de la vida a algún ejemplar de tortuga o mamífero marino, recolecte o almacene cualquier forma de sus productos o subproductos.
Por lo que el propietario fue puesto a disposición del Ministerio Público. Además, el personal de la Profepa determinó que, por las condiciones físicas que presentan los huevos, no es posible que estos sean reinsertados en alguna playa para su incubación (siembra) y posible eclosión.
La mayoría de las tortugas que arriban al estado de Jalisco son de la especie Golfina (Lepidochelys olivácea), la cual se encuentra bajo el estatus en Peligro de extinción, además de ser regulada por la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (Cites).