México, 23 de mayo 2018 (NOTIGODÍNEZ).- La cacareada «competitividad» de México que tanto prometía Enrique Peña Nieto, usurpador de la Presidencia de la República, que subiría tras la aprobación de las contrarreformas neoliberales… se ha desplomado durante su espuriato sangriento, corrupto y fracasado, aunque, desde el punto de vista de los empresarios nacionales y extranjeros beneficiados con el saqueo, las contrarreformas y, en general, el desempeño del régimen peñista, han sido todo un éxito pese a la quiebra del país.
De acuerdo con el diario Reforma, citando un informe elaborado por el Instituto Internacional para el Desarrollo Gerencial (IMD, por sus siglas en inglés), nuestro país ha caído 10 lugares en competitividad mundial entre 2014 y 2018, principalmente por el debilitamiento de la infraestructura, educación y concentración de exportaciones en socios.
El Índice de Competitividad Mundial es elaborado anualmente por el IMD, una de las escuelas de negocios más «prestigiadas» del planeta, y tiene por objetivo evaluar el desempeño económico de las naciones.
En el informe de este año, nuestro país se ubicó en el lugar 51 de 63 países evaluados, tres lugares por debajo del sitio que ocupó el año pasado en dicho índice. Con este resultado, México liga tres años consecutivos a la baja y un retroceso de 10 posiciones desde 2014 a la fecha.
Este año, México obtuvo 63.7 puntos totales de 100 posibles en el índice de competitividad.
Según el análisis citado por Reforma,“México cayó al puesto 51 como resultado del empeoramiento de las percepciones sobre la calidad de las instituciones y la legislación empresarial, así como la facilidad para hacer negocios y algunos aspectos del Gobierno corporativo.»
También señala como debilidades el incremento en la corrupción -una de las marcas registradas del actual régimen-, los sobornos a «funcionarios» para la entrega de contratos, concentración de exportaciones por socio, transparencia y seguridad personal y derechos de propiedad privada.
En tal sentido, se sugiere a nuestro país «mejorar el ambiente empresarial a través de una mejor elección de presidente para mejorar la justicia y seguridad” (!).
Opinión:
Nada nuevo bajo el sol. Pareciera que estamos «copiando y pegando» la nota del año pasado sobre el asunto. Pero más allá de que las noticias se estén repitiendo -porque los mexicanos repiten su historia-, todo esto se predijo antes de que Peña Nieto se robara la Presidencia en 2012. La ciudadanía informada sabía de sus intenciones por imponer las contrarreformas y las consecuencias bárbaras que el vandalismo constitucional provocaría en el país. Sin embargo, la mayoría de los mexicanos no escuchó. Seducidos por el canto de la sirena morena, bajaron los brazos en la lucha contra la imposición y ahora, ahogados en sangre, miseria y muerte, pagan las consecuencias de su inmovilidad. ¿Se repetirá el ciclo el próximo 1 de julio? ¿Qué sorpresa tiene preparada ahora la oligarquía mientras los mexicanos siguen esperando un «milagro» sin hacer absolutamente nada por ayudar a materializarlo?
Con información de Reforma