Redacción Proceso
MÉXICO, D.F. (apro).- Hipólito Mora y José Luis Torres, Simón El Americano, cuyos grupos se enfrentaron el martes pasado en La Ruana, con un saldo de 11 muertos, deberán entregar sus armas, rendir declaración y someterse a las diligencias necesarias o, de lo contrario, cambiará su situación jurídica, advirtió el comisionado para la Seguridad del estado, Alfredo Castillo.
“El pleito es entre Luis Antonio Torres González Simón El Americano e Hipólito Mora Chávez, quienes tendrán que coadyuvar con las investigaciones y presentar sus declaraciones, así como entregar sus armas para que se les hagan las pruebas correspondientes”, dijo en entrevista radiofónica con Grupo Imagen.
Luego, en rueda de prensa dijo que El Americano, dejó de formar parte del Grupo G250 de operaciones especiales desde el pasado 15 de diciembre, mientras que Hipólito Mora sigue enlistado como policía rural. Sin embargo, Castillo señaló que independientemente de su posición, ambos serán investigados a fondo.
En cuanto a los que participaron en el enfrentamiento, dijo, se les aplicarán pruebas de rodizonato de sodio en manos y ropa para saber si dispararon armas de fuego durante el enfrentamiento.
Por lo pronto adelantó que se comprobó que los 11 que participaron el martes en el enfrentamiento dispararon armas de fuego.
Adelantó que la noche de este miércoles tendrá por los menos 45 declaraciones y el número de personas que participaron en los hechos violentos del martes.
Asimismo, reveló que ya concluyeron las necropsias a los cuerpos de las 11 víctimas del enfrentamiento, y que ahora sigue la reconstrucción de los hechos con testimoniales, para ver de dónde provinieron los tiros, el calibre de armas y cuántas se utilizaron.
“Lo que es importantes es que, con las testimoniales, ver el tema de quién empieza a disparar (…) Las periciales nos permitirán validar el dicho de las personas, a través de un expediente.
“En las próximas horas podremos tener un poco más de certeza de qué sucedió y probablemente en días tener resuelto este asunto”, dijo Castillo.
Por su parte, en una improvisada rueda de prensa, en La Ruana, Hipólito Mora, cuyo hijo fue abatido durante el enfrentamiento con los seguidores de El Americano respondió a Castillo que no entregará las armas a pesar de la posibilidad de ser encarcelado nuevamente por las “marcadas diferencias” que existen entre su grupo y el de El Americano.
Mora dijo que uno de los peores errores que cometió Castillo fue armar a grupos de delincuentes a sabiendas de que se dedicaban a la extorsión, el secuestro y el tráfico de drogas.
Y reiteró que a pesar del discurso oficial, la extorsión y el secuestro son parte de la cotidianidad en la región.
También insistió en acusar al gobierno de proteger a El Americano y a Castillo de fallar en su labor como pacificador. Además reprochó al gobierno federal y estatal que no se hayan acercado a él.
La Gendarmería nos atacó: El Americano
Entrevistado por Milenio, El Americano negó que los miembros de su grupo hayan disparado contra los de Hipólito Mora, entre ellos a su hijo Manuel Mora, quien murió en el enfrentamiento.
Y afirmó que sólo respondieron al ataque de la Gendarmería que estaba con el grupo de Hipólito, lo que contradice la versión de Mora de que las fuerzas federales lo habían dejado solo.
“A Hipólito le digo que sepa bien que nosotros sólo respondimos a una agresión de la Gendarmería que estaba con ellos y nos disparaban a nosotros”, dijo El Americano, quien se presentó en la plaza principal de La Ruana y mostró su camioneta con impactos de bala de alto calibre, superior a los rifles R15 que utilizan el grupo de Mora y la Fuerza Rural.
Según la versión de Torres, la Gendarmería fue la que disparó a su camioneta blindada para tratar de matarlo y afirmó que su grupo no abrió fuego contra Hipólito y su grupo, sólo repelieron las agresiones.
“La Gendarmería nos tiró y nosotros quedamos en medio del fuego. El problema es que el retén de la Gendarmería está junto al de Hipólito y su gente”, excusó.
Según El Americano, no hay diferencias con Hipólito y señaló que el enfrentamiento entre ambos sólo beneficia a Los Caballeros Templarios y a su líder Servando Gómez Martínez, La Tuta, quien sigue prófugo.
“No hay diferencias con Hipólito. Nosotros no fuimos a provocarlos a ellos, queríamos que se fuera la Gendarmería, que pusieran retenes militares.
“Pero los Gendarmes se acomodaron con Hipólito y ellos ya saben cómo actúan. Nosotros no pensábamos que ya estuvieran acomodados”, dijo el exautodefensa quien rindió declaración esta tarde ante ministerios públicos de Apatzingán y Lázaro Cárdenas que se trasladaron a La Ruana.
Torres recalcó su petición a Castillo para que retire a los elementos de la Gendarmería y coloque retenes militares en su lugar, mientras que de los acontecimientos del martes, dijo: “no somos animales para que no nos duelan nuestros muertos y por causa de él, (de Hipólito) la Gendarmería se unió para atacarnos”.