México, 11 de junio 2017 (NOTIGODÍNEZ).- El brutal hostigamiento contra los valientes y auténticos periodistas no para en este convulsionado país, secuestrado por criminales de la más baja ralea.
De acuerdo con el portal digital de la revista Proceso, un grupo de hombres presuntamente armados a bordo de un auto con vidrios polarizados, vigilaron durante dos días el domicilio del reportero Ezequiel Flores Contreras, corresponsal del semanario en Guerrero.
Flores narró a Proceso que los hechos ocurrieron el jueves 8 y viernes 9 de este mes, a las afueras de su domicilio ubicado al norte de Chilpancingo, capital del violento estado guerrerense.
La noche del viernes, el reportero recibió informes de que un grupo de sujetos presuntamente armados a bordo de un auto color verde, se encontraban afuera de su domicilio. Se le alertó que desde el día anterior, los tripulantes del vehículo estuvieron preguntando a los vecinos “dónde vivía el corresponsal de Proceso”.
En seguida, cerca de las 21:28 horas del viernes 9, Flores se comunicó a los teléfonos del mecanismo de protección a periodistas del régimen usurpador del asesino de Atenco, Enrique Peña Nieto, para solicitar apoyo y seguridad durante el traslado y estancia en su domicilio.
Según el periodista afectado, el mecanismo turnó inmediatmente la solicitud a la Policía Federal (PF), misma que demoró casi dos horas para enviar agentes al sitio donde se ubicaba el reportero e instalar un cordón de seguridad en su domicilio. De hecho, Flores tuvo que pedir apoyo a agentes de la «Secretaría de Seguridad Pública» federal para agilizar la respuesta de la PF.
El corresponsal de Proceso aclaró que en ningún momento pensó en solicitar apoyo de la Policía Estatal, debido a la falta de confianza, certeza jurídica y en general por la ingobernabilidad imperante en el Estado desde que el priista Héctor Astudillo llegó al poder.
Finalmente, pasadas las 23:00 horas, agentes de la corporación federal atendieron al periodista y lo trasladaron a su domicilio una vez que la zona quedó asegurada por elementos policiacos.
No obstante, aunque se comprometieron a mantener vigilancia permanente para evitar una posible agresión y darle seguimiento al caso, no se han comunicado con el reportero para verificar que se cumplan las medidas de protección y vigilancia ordenadas por el mecanismo federal.
Flores Contreras ha sido objeto de acoso sistemático por lo menos desde 2014, con incidentes como el allanamiento de su domicilio, agresiones por parte de «golpeadores del gobierno» estatal, hostigamiento de elementos de la «Secretaría de la Defensa Nacional» (Sedena), entre otros.
En febrero de 2016, el exdiputado y exalcalde perredista de Acapetlahuaya, Roger Arellano Sotelo, amenazó de muerte al corresponsal de Proceso cuando éste se manifestaba frente al congreso estatal por el asesinato de la periodista Anabel Flores Salazar.
Con información de Proceso