México, 7 de junio 2019 (NOTIGODÍNEZ).- Despreciando abiertamente los llamados al diálogo y la concordia de su homólogo mexicano Andrés Manuel López Obrador, el magnate Donald J. Trump, presidente de Estados Unidos, volvió a ningunear sin pudor alguno a nuestro país y aseguró que el suyo no necesita de ningún modo a los mexicanos, sino al contrario.
La semana pasada, Trump amenazó con imponer aranceles de 5 por ciento a las importaciones desde México hacia Estados Unidos, como medida coercitiva para obligar al gobierno del tabasqueño a contener el flujo de migrantes en ruta hacia el vecino país del norte. A medida que se acercan las elecciones en la Unión Americana, Trump ya piensa en reelegirse y repite el discurso racista, proteccionista y patriotero que lo llevó a la Presidencia por primera vez.
En entrevista para la cadena Fox, una de las consentidas de su desgobierno, Trump se regodeó en su prepotencia y dejó en claro que no le inquieta en lo más mínimo la respuesta de México a su amenaza arancelaria, concretamente sobre la posibilidad que no se ratifica el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), ya que, a decir del magnate, su país no necesita a México.
“No estoy preocupado porque ellos nos necesitan, nosotros no los necesitamos, ellos nos necesitan”, sentenció a pregunta expresa sobre posibles represalias de México si cumple su amenaza de imponer aranceles.
Sobre el acuerdo comercial del T-MEC, cuya ratificación podría comprometerse si Trump insiste en aplicar impuestos a las importaciones desde México, el magnate fue aún más contundente:
“El TLC es uno de los acuerdos más estúpidos en nuestros tiempos”, remató.
De acuerdo con la agencia Proceso (Apro), fue el pasado 30 de mayo cuando Trump amagó con imponer un arancel del 5 por ciento a todos los productos mexicanos si nuestro país no detiene el flujo de migrantes. Estos aranceles aumentarían progresivamente en cinco por ciento cada mes. Así, el arancel subiría a 10 por ciento el 1 de julio; a 15% el 1 de agosto; a 20% el 1 de septiembre y a 25 % el 1 de octubre de 2019.
Poco después de que Trump diera a conocer su rabioso chantaje, López Obrador difundió una carta pública llamándolo a dialogar civilizadamente aunque aclarándole que no es “cobarde ni timorato”. Sin embargo, el magnate no respondió a la misiva y reiteró sus amenazas.
Asimismo, una delegación mexicana encabezada por el canciller Marcelo Ebrard viajó desde el fin de semana pasado a Washington, capital del vecino país del norte, para tratar de desactivar la medida impositiva de Trump sin resultados concretos hasta ahora.
Sin embargo, se espera que en la tercera reunión que sostendrán los diplomáticos mexicanos con funcionarios estadounidenses, el próximo viernes, se alcanzará un acuerdo satisfactorio entre ambas partes.
Opinión:
Nada de que sorprenderse ni espantarse. Trump simplemente dice la verdad con el estilo rabioso que le caracteriza. Puede no gustar debido a que estamos acostumbrados a la simulación e hipocresía –“diplomacia”, le llaman–, pero lo cierto es que México es traspatio de Estados Unidos desde hace décadas y, efectivamente, la dependencia de nuestro país hacia aquel imperio barbárico y neoliberal es absoluta. Agradézcanlo a casi un siglo de regímenes usurpadores priistas y panistas apátridas. En el fondo, Trump nos está ayudando a sacudirnos esa maldita dependencia, a despertar y reaccionar dignamente. “El abusivo vive hasta que el miedoso quiere”, reza, más o menos por ahí, un famoso dicho mexicano. Ya va siendo hora de tomarle la palabra al mamarracho Trump, cerrar la frontera –eso incluye dejar de pasar el agua, petróleo y otros recursos nacionales que se roban las trasnacionales– y recuperar nuestra soberanía. Ya lo hemos conseguido en el pasado. Podemos lograrlo una vez más o cuantas veces sea necesario.
Con información de Apro
