Felipe Calderón presume que puede andar «con la frente en alto»… rodeado de militares pagados por los mexicanos

México, 5 de abril 2016 (NOTIGODÍNEZ).- El genocida Felipe Calderón está muy orgulloso de haber usurpado la presidencia en 2006, de haber dejado la cifra macabra de más de 60 mil muertos –algunos medios calculan más de 100 mil– durante su espuriato sangriento, otras tantas decenas de miles de desaparecidos, entreguismo, desastres ecológicos, caos social, represión y, para cerrar con broche de oro, una contrarreforma laboral monstruosa que liquidó los derechos de los trabajadores mexicanos, como preámbulo a la invasión de las trasnacionales facilitada por su, también espurio, sucesor priista.

En tal sentido, de acuerdo con el portal Informador.mx, el sujeto se exhibió en un acto proselitista en Aguascalientes, declarando cínicamente que le encanta andar en campaña y que «puede andar con la frente en alto» por las calles.

“Podemos haber tenido, como cualquier persona virtudes y defectos, aciertos y errores […] Sí, puedo decirles, amigas y amigos, a todas y a todos ustedes que puedo caminar por las calles de México con la frente en alto porque gobernamos con el corazón en la mano, con honestidad, con austeridad y con verticalidad”, se burló derrochando el cinismo que siempre le ha caracterizado.

Lo que no dijo es que si puede andar así por las calles, pese a que huyó de México a días de concluido su régimen usurpador apostando a la desmemoria, es porque los mexicanos sumisos le pagan su costosa seguridad privada a través del Estado Mayor Presidencial, aparte de la megapensión vitalicia. Con los gorilas del Ejército protegiéndolo y la represión brutal en el país, no ha aparecido el valiente que se atreva a encararlo para decirle su precio.

De hecho, en febrero de 2015, la agencia Proceso informó que Calderón es el ex «presidente» que más cuesta a los mexicanos, al erogarse UN MILLÓN 21 MIL 880 PESOS MENSUALES por concepto de pensión más el sueldo de 19 asesores, así como sus gastos de seguridad.

En realidad el dipsómano Calderón es repudiado a la distancia cuando aparece en espacios públicos, y solamente su claque partidista, lambiscones que lo acompañan o de plano, gente muy bruta, le hacen alguna reverencia.

Desde hace varios meses, el sujeto ha descarado su intención de regresar a Los Pinos a través de su mujer, Margarita Zavala, haciendo proselitismo anticipado en su favor. Así que sigan «trabajando durísimo por México» para que ese adefesio y su mujerzuela puedan seguir caminando «tranquilamente» con la frente en alto, mientras se hacen campaña rumbo al fraude de 2018.

Con información de Informador.mx

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Un comentario:

  1. Es fácil hablar y juzgar.
    Seguro tu en su lugar te harias de la vista gorda ante tanto secuestro, extorcion y asesinatos por personas que andan en la calle nada mas viendo a quien chingar.

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