PRD «se arrepiente» por avalar contrarreformas de Peña… pero no devuelve los millones que cobró

México, 10 de septiembre 2015 (NOTIGODÍNEZ).- En un acto supremo de fariseísmo y doble moral, el líder nacional del «Partido de la Revolución Democrática», Carlos Navarrete, «reprobó la gestión de Enrique Peña Nieto» y admitió que fue un error ser sus cómplices y avalar las llamadas «reformas estructurales».

Así son estos vividores de la «política» en el teatro del absurdo llamado México. Primero lanzan la piedra y luego esconden la mano, para después mostrarse «arrepentidos» mientras con la otra siguen robando a manos llenas. ¿Y el pueblo? Manteniéndolos y escuchando en silencio sus burlas e insultos.

En conferencia de prensa, el farsante Navarrete, acompañado por los miembros del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) y los coordinadores de diputados y senadores, es decir, la «crema y nata» de criminales y cómplices del régimen usurpador, consideró que el «gobierno federal está pasmado y tiene serias incapacidades para brindar resultados».

Citado por la agencia Proceso, el líder perredista defendió la inasistencia de los «legisladores» del sol azteca –excepto el genuflexo Jesús Zambrano, actual presidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados y abiertamente empleado de Peña– a Palacio Nacional para escuchar el mensaje del usurpador, un circo ignominioso al que llamaron «tercer informe de gobierno».

“Si hacemos un balance de los objetivos y de los resultados a tres años, el [des]gobierno está reprobado y tiene que reconocerlo. No reconocerlo es pensar que van bien y que, por lo tanto, seguir el rumbo por el que van los llevará a buen puerto a ellos y al país. Sería una grave equivocación”, indicó el farsante sujeto, con miras a engañar otra vez a un montón de imbéciles rumbo al fraude electoral que ya se cocina.

¿Por qué no mejor convoca a la ciudadanía a revertir las contrarreformas y derrocar a la mafia que impuso a Peña Nieto? Ah, no, eso nunca. Se trata de simular, no de despertar conciencias.

Lo que tampoco dijo es que los «diputados» se embolsaron más de 2 millones de pesos cada uno en bonos y partidas extraordinarias, pagadas justo después de haber aprobado las contrarreformas. En su momento, el entonces diputado Ricardo Monreal –hoy delegado de Cuauhtémoc por Morena– mostró recibos con los pagos depositados como «apoyo por las reformas».

Los «arrepentidos» perredistas, ¿devolvieron el dinero de todos los mexicanos que se embolsaron por firmar el pacto y avalar el vandalismo constitucional que hicieron con Peña y cómplices? Por supuesto que no. Son farsantes pero no tarugos. «Lo caído, caído», ¿verdad? Al cabo que el pueblo paga sin rechistar.

Con información de Proceso

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