¡Claro! Que el pueblo idiota pague todo, ¿no?
Lilia González
El Economista
Al arrancar el tercer año de la 62 Legislatura, el sector empresarial de México exhortó al Congreso no elevar los impuestos a las empresas, en particular los vinculados con la generación de empleos, y en cambio, abrir un diálogo que permita ajustes para promover la inversión y el crecimiento.
“Para miles de empresas formales resultaría fatal el que aumentaran aún más los costos que erogamos por las diversas obligaciones que tenemos con el Estado, en particular los relacionados con la generación de empleos. Lo que hay que hacer es afianzar condiciones propicias para abrir fuentes de trabajo bien remuneradas, y no estimular la informalidad y el desempleo”, sentenció Gerardo Gutiérrez Candiani, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
Destacó la labor ardua del pasado periodo de sesiones ordinario y extraordinario en el Congreso de la Unión, ritmo que deberá mantenerse a fin de que todos los actores se abran al diálogo y a los ajustes necesarios que promuevan la inversión, el crecimiento y el empleo.
A través de su mensaje semanal, el líder empresarial refirió que el gran pendiente es el ataque a la corrupción y la inseguridad, de lo contrario los avances de las reformas estructurales quedarán truncos.
“El asunto de mayor trascendencia que sigue sin cumplirse entre los compromisos asumidos por las fuerzas políticas al inicio de este sexenio, es la creación de una arquitectura institucional sólida que dé sentido y fuerza al combate a la corrupción, como prioridad estratégica nacional”, expresó el dirigente empresarial.
Para el presidente del CCE ya no existen pretextos, como una sobrecarga de pendientes, para que no se procese con diligencia la legislación necesaria para constituir la Comisión Nacional Anticorrupción, que se ha propuesto y demandado desde la sociedad civil hace muchos años. “Procede descongelar cuanto antes la minuta, abrir el debate público y la consulta, corregir lo que sea necesario, enriquecerla y aprobar la mejor fórmula”, consideró.
México no puede considerarse como una nación que se está reformando plenamente en tanto no se comprometan, todos, a fondo, a abatir la corrupción y la impunidad, acotó Gutiérrez Candiani.