México, 11 de diciembre 2015 (NOTIGODÍNEZ).- El portal digital Red-Acción difundió el pasado martes 8 de diciembre un recuento de atropellos denunciados por la «oposición», durante la aprobación de la reforma a la ley del Sistema de Pensiones del Issste (Pensionissste) en la «cámara de diputados», perpetrada por la aplanadora PRI, AN, VEM, ANAL.
La iniciativa de Enrique Peña Nieto y aprobada por sus esbirros en el «congreso» que usurpan, consiste en desincorporar del Estado al sistema Pensionissste para que deje de ser financiado con recursos del erario, es decir, de todos los mexicanos –porque se suponía que para eso y otros menesteres pagamos impuestos–, y convertirlo en una empresa que subsista con sus propios recursos.
De esta manera, Pensionisste se volverá una entidad paraestatal que funcionará igual que las saqueadoras afores (bancos), con las que ahora competirá, y encima tendrá participación de la iniciativa privada. Es decir, al menos la mitad de los recursos de los trabajadores que actualmente controla Pensionissste y que ascendían a más de 120 MIL MILLONES DE PESOS, pasarán a manos de las empresas privadas que los utilizarán para inversiones bursátiles, créditos, préstamos (usura) y otros negocios millonarios. Oficialmente, esto arrancará a partir del 1 de julio de 2016.
Los «diputados» de Morena confirmaron que la reforma obedece exclusivamente a intereses de particulares y denunciaron que con ella se liquidan los seguros de cesantía, vejez y edad avanzada que se encuentran en la Tesorería del Issste, pues al derogar el artículo décimo primero transitorio de la ley de pensiones, pasan a un limbo legal.
Asimismo, enfatizaron la obviedad de que el dictamen allana el camino hacia la privatización total del propio Issste, con la apertura al capital privado de su sistema de pensiones.
De hecho, la creación de la nueva paraestatal a partir de Pensionissste constituye ya una privatización disfrazada. La nueva empresa tendría un «consejo de administración» a modo para servir a los intereses de los particulares que la rapiñen. Virtualmente, se trata de una extinción de Pensionissste por decreto, “como sucedió con Luz y Fuerza del Centro para entregar dinero público al capital privado. Con ello se consumaría un atraco a los intereses más valiosos del pueblo trabajador, su bolsillo, su salario y, sobre todo, su futuro, el cual sería incierto y vulnerable”.
Actualmente, según argumentó la «oposición», Pensionissste es una de las administradoras de ahorro que más rendimientos entrega a los trabajadores del Estado, cobra menos comisiones y los ingresos que obtiene son reinvertidos en las cuentas individuales, con todo y que en los últimos años muchos trabajadores han cerrado sus cuentas en esa entidad para entregarle su dinero a las afores privadas.
Por ello, la «reforma» peñista sólo es otro engendro vandálico que obedece a los grandes empresarios nacionales y extranjeros, bancos principalmente en este caso, apuñalando una vez más en el proceso a los intereses de los trabajadores de este país.
Con información de Red-Acción