México, 10 de noviembre 2016 (NOTIGODÍNEZ).- Tras la inesperada victoria del magnate republicano Donald J. Trump en las pasadas elecciones presidenciales de Estados Unidos, miles de ciudadanos del vecino país del norte han marchado y protestado en toda la Unión Americana bajo el lema «NOT MY PRESIDENT». Ahí tienen la «democracia ejemplar» en el imperio neoliberal, más decadente y corrompido que nunca.
Pese a que tanto Hillary Clinton, contrincante demócrata del hitleriano presidente electo, como el genocida Barack Hussein Obama, han aceptado el resultado de las votaciones de este martes 8 de noviembre, hoy arreciaron las protestas que se han extendido incluso a los estados donde Trump dispone de más simpatizantes.
Esta mañana, decenas de personas marcharon y protestaron frente a la Casa Blanca en Washington, justo a la hora en que Trump pisó por primera vez la que será su residencia en los próximos cuatro años, para reunirse con el actual presidente Obama.
Obstaculizados por un cordón policiaco de seguridad, los manifestantes se agruparon en el parque Lafayette cercano a la Avenida Pennsylvania, del lado norte de la Casa Blanca, punto habitual de manifestaciones públicas en Washington.
«No me representa. Alentó la violencia contra mí. Viniendo para acá un tipo me ha dicho que me vaya del país. Este país es la única casa que conozco», dijo Mobashra Tazamal, una migrante pakistaní que es hoy ciudadana estadounidense. Ella y otra joven ondeaban una pancarta con la leyenda «FUCK TRUMP. #NotMyPresident» —»Que se joda Trump. #NoEsMiPresidente».
«Soy musulmana, mujer, inmigrante. Donald Trump ha atacado a todas mis identidades», añadió la joven activista, de 27 años.
En tanto, se registraron protestas en Manhattan y la emblemática Union Square de Nueva York, donde esta noche se realizará una nueva protesta contra Trump por segunda ocasión consecutiva.
Asimismo, decenas de convocatorias circularon en las redes sociales para unirse a protestas en Washington D.C., Baltimore, la Universidad de Wisconsin y otros lugares.
Ayer miércoles hubo protestas en al menos 10 ciudades, incluida una en el centro de Manhattan, donde los manifestantes marcharon hacia la Torre Trump, la lujosa vivienda del presidente electo en la Quinta Avenida.
Muchos coreaban «¡No es mi Presidente!» y repudiaron sus discursos racistas de campaña, en los que atacó a inmigrantes, musulmanes y otros grupos.
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Se espera que las manifestaciones se prolonguen por lo menos hasta el fin de semana, según las convocatorias que circulan en Internet. No obstante, ya se tiene programada una manifestación masiva en 20 de enero de 2017 en Washington D.C., día en que Trump asumirá el poder en el vecino país del norte.
Con información de Reforma