México, 25 de marzo 2019 (NOTIGODÍNEZ).- El gobierno de Andrés Manuel López Obrador, presidente de la República, modificó el modelo de negocios establecido en la contrarreforma energética de 2013, cancelando definitivamente las subastas de yacimientos petrolíferos y del mercado eléctrico nacional.
Las drásticas modificaciones a las reglas de la inversión privada en el sector energético, aún sin haber impulsado cambios legales, constituyen un primer paso para anular la contrarreforma impuesta por el régimen usurpador del asesino de Atenco, Enrique Peña Nieto, que prácticamente entregó la riqueza petrolera del país al mejor postor.
No obstante, aunque el nuevo gobierno dejará de realizar subastas eléctricas y licitaciones para la explotación de yacimientos petrolíferos, empresas privadas aún podrán realizar «inversiones» y obtener contratos por parte de Petróleos Mexicanos (Pemex) y Comisión Federal de Electricidad (CFE).
En el caso de Pemex, la otrora paraestatal volverá a estar a cargo de la exploración de yacimientos y producción de hidrocarburos, mientras que CFE hará la propio en la explotación de activos del sector eléctrico.
Expertos consultados por el diario Reforma confirmaron que las nuevas disposiciones del gobierno implican la cancelación de licitaciones petroleras y eléctricas, lo que obligará a las empresas a definir nuevas estrategias para asegurar inversiones en el sector energético mexicano.
Noé H. Sáenz, directivo de Burns & McDonnell –firma dedicada a ofrecer servicios de ingeniería y construcción de infraestructura energética–, confirmó que el gobierno federal intenta que Pemex recupere el control de la explotación de petróleo, sacando con ello a las empresas nacionales del negocio. Por ello, pidió al régmien lópezobradorista definir con claridad el marco regulatorio para conocer la expectativa real de inversión.
«Cuando se dan las cancelaciones sin saber cuáles son los siguientes pasos, la incertidumbre crece», alertó en entrevista para el medio aquí citado.
Por su parte, Rosanety Barrios, experta en energía, dijo a Reforma que los cambios impuestos por el gobierno del tabasqueño prácticamente sepultan la contrarreforma energética peñista en su esencia.
«La reforma está muerta hoy sin haber cambiado la Constitución, porque ya pararon los mecanismos de acceso a inversión privada, que son las licitaciones petroleras y eléctricas», apuntó.
El rotativo recordó que, en últimas fechas, Pemex ha otorgado contratos millonarios sin licitación a empresas energéticas de reciente creación ligadas a Grupo Bimbo, de la familia de origen español Servitje, y Grupo Lala, de Eduardo Tricio Haro.
Opinión:
«Después de atole», ya con varias trasnacionales saqueando nuestros yacimientos en el Golfo, aguas someras y tierra firme, e invadiendo nuestro propio territorio para vendernos gasolina cara. Pero reconocemos el primer paso para frenar la rapiña de la riqueza, mucha o poca, que nos queda. En este medio alternativo hemos exigido hasta el cansancio que AMLO cumpla su juramento patriótico de abrograr esa maldita contrarreforma. Nos gustaría ver cancelado ese engendro directamente en la Constitución –y así debe hacerse–, pero por ahora reconocemos el primer avance para salvaguardar nuestra riqueza petrolera. Y falta mucho más, empezando por dejar de entregar contratos millonarios de Pemex y CFE a empresas corruptas, parar la invasión del mercado de venta de gasolinas, así como dejar de calcular las tarifas de combustibles con base en los precios internacionales del petróleo, es decir, dejar de someternos a la voracidad de las criminales trasnacionales. Esa aberración debe frenarse de inmediato para bajar los precios al consumidor y, en paralelo con la producción propia de hidrocarburos y petroquímicos, recuperar nuestra soberanía energética. Seguiremos insistiendo en ello porque así lo juró AMLO en 2014 ante la nación.
Con información de Reforma