Roxana Aguirre
La Jornada (Foto: Una bebé abandonada en calles de Reynosa. Imagen de archivo / MEDIA HORA)
Veracruz, Ver.- En la fresca mañana, envuelta en una bolsa de basura, con el cordón umbilical atado con un cordón, muestra de que el parto no se realizó bajo ningún cuidado hospitalario; así fue hallada una bebé que pasó sus primeras 24 horas de vida abandonada.
Eran las seis de la mañana en la esquina de Josefina Río Melo y Camino Real en la colonia Villa Rica, vecinos notaron algo extraño envuelto en el saco plastificado de basura negro, al percatarse de la presencia de la recién nacida de inmediato llamaron a la Cruz Roja.
“La paciente llegó en regulares condiciones de higiene, con glucosa baja por la falta de alimento oportuna y con hipotermia, es decir fría por la exposición”, informó el director del Hospital Regional de Veracruz, Rafael de Jesús Picazo Figueroa.
La bebé permanece hospitalizada, se encuentra en el área de cuneros, pesa dos kilos 950 gramos y tiene 40 semanas de gestación, es decir es un bebé de término.
“Está sin ninguna complicación y problema, sin embargo este tipo de situaciones se mantienen en observación debido a la forma en que nació, por lo que se le considera bebé potencialmente en riesgo y en este momento está fuera de peligro, está bien, sin mayor complicación, pudiera estar en su casa si así fuera el caso”, comentó el médico.
El Ministerio Público (MP) y las autoridades del Desarrollo Integral de la Familia (DIF) municipal tomaron cargo del asunto para determinar qué pasa con la custodia de la pequeña.
Es el primer caso de este tipo que llega al Hospital de alta especialidad en Veracruz; mientras que el año pasado sólo tuvieron uno.
Uno de los casos que más se recuerda por su desenlace es el de “Angelito”, un bebé que fue encontrado el 4 de enero del 2011 en una obra de construcción, en medio de un hormiguero, los insectos le provocaron heridas severas y presentaba un cuadro de hipotermia.
Tres meses después el pequeño que se convirtió en el hijo putativo de todas las enfermeras del Hospital de Tarimoya. Murió por una neumonía muy complicada.
Otra bebé que fue abandonada en ese año, nombrada “Angelita”, sobrevivió y fue dada en adopción por el sistema DIF.