Virgilio Sánchez
Reforma
El Seguro Popular dejó caducar cientos de cajas de medicinas en lugar de distribuirlas en su red hospitalaria en la entidad.
REFORMA constató que las medicinas se encuentran abandonadas a la intemperie en el patio trasero de una bodega situada en el Municipio de Tlalixtac de Cabrera, a un costado de la carretera federal 190.
Las cajas están mojadas debido a las recientes lluvias, algunas ya están destruidas y otras pisoteadas.
Algunas botellas con suero están esparcidas por el terreno entre el lodo, pues el lugar no está pavimentado.
Trabajadores del Régimen Estatal de Protección Social en Salud (REPSS), que pidieron no revelar sus nombres, denunciaron que el medicamento fue adquirido por la actual administración y que no fue distribuido en las unidades médicas, por lo que ya caducó y fue desechado en el patio trasero de la bodega.
Las medicinas están amontonadas junto a sillas rotas, cajones de madera que se emplean para estibar, una ambulancia abandonada, colchones viejos, papelería de desecho, entre otros artículos.
El personal del almacén del Seguro Popular acumula la mayoría de los medicamentos caducados en un espacio que se forma entre la barda perimetral y un viejo salón con grafitis en su fachada.
El acceso a esa zona es exclusivo para el personal del Seguro Popular.
El inmueble tiene un almacén grande con paredes de concreto y techo de lámina.
El Seguro Popular en Oaxaca es dirigido por Salvador Monroy Rodríguez, cuñado del presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Gerardo Gutiérrez Candiani.
De acuerdo con las fuentes consultadas, quien estuvo a cargo de la adquisición y pago de esos medicamentos fue Monroy, quien fue designado por el Secretario estatal de Salud, Germán Tenorio.
A través de la oficina de comunicación social de la Secretaría de Salud se solicitó una versión sobre los medicamentos que se dejaron caducar, pero se informó que será hasta hoy jueves cuando den una versión al respecto.
De acuerdo con un informe del ejercicio 2013, elaborado por la oficina de Monroy, el abasto de medicamento promedio anual fue del 86 por ciento, mientras que el de material de curación fue del 91 por ciento.
El mes crítico en ambos rubros fue octubre, según el informe oficial, cuando las unidades médicas de Oaxaca sólo contaron con un 80 y 87 por ciento de abasto en medicinas y material de curación, respectivamente.
De acuerdo con cifras del Seguro Popular, en Oaxaca cuentan con un padrón de beneficiarios de 2.7 millones de personas.
Su gasto en medicamentos, material de curación y otros insumos en 2013 fue de 779.2 millones de pesos, mientras que el valor de lo que resguardó ese año el almacén donde se encontró la medicina tirada ascendió a 169.1 millones de pesos.
La Secretaría de Salud estatal informó que cuentan con mil 550 unidades, 35 hospitales, 3 clínicas de especialidad, 164 unidades móviles, mil 948 casas de salud, 2 mil 133 camas censales y 2 mil 526 consultorios.