México, 6 de junio 2018 (NOTIGODÍNEZ).- El remate de la planta productiva nacional no para, al contrario, se intensifica a medida que concluye el actual espuriato, más traidor y entreguista que ninguno.
A la entrega del petróleo y la invasión de trasnacionales que hoy importan, almacenan y venden gasolina cara a los mexicanos en su propio territoro -el colmo del absurdo, siendo México un país petrolero por excelencia-, súmese ahora la entrega a particulares del millonario negocio del suministro de turbosina, combustible requerido por la industria aeronáutica.
De acuerdo con el diario El Economista, el régimen usurpador del priista Enrique Peña Nieto, a través de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), se alista para abrir el mercado de la turbosina a empresas privadas, con lo que podrán competir con la paraestatal Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA), que tenía la exclusividad de ese negocio, en el almacenamiento, distribución y suministro del combustible de turbina de aviación.
Como en el caso de las gasolinas, se pretexta nuevamente que el «monopolio» de ASA impide el suministro del combustible “a precios competitivos, afectando a las aerolíneas y pasajeros del país”. Esto, a sugerencia de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), acatada por la SCT.
El citado medio informó que la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), tiene ya listo para su divulgación un aviso donde afirma que ha quedado derogado el artículo noveno transitorio del Reglamento de la Ley de Aeropuertos, lo cual permitirá “dar claridad y seguridad jurídica a cualquier interesado en participar en la prestación del servicio complementario de suministro de combustible en los aeropuertos, así como a los usuarios de este servicio (transportistas aéreos y operadores)”.
De esta manera, quedará formalizada la entrega de negocio de suministro de turbosina en los aeropuertos del país, mismo que el año pasado representó ingresos superiores a los 39 MIL MILLONES DE PESOS, casi 35 por ciento más que en el 2016.
Según cifras de El Economista, ASA registró la venta histórica de 4 mil 756 millones de litros de turbosina en 2017, eso es, 7.3 por ciento más que el año previo, principalmente en los aeropuertos de la Ciudad de México, Cancún y Guadalajara. Las compras que hicieron Aeroméxico, Volaris, Interjet, VivaAerobus, United, American Airlines, Delta y Air France representaron 68 por ciento del total.
En abril de este año, empresas trasnacionales exigieron al régimen usurpador de Peña Nieto acabar con el «monopolio» de ASA en el suministro de turbosina. Las beneficiadas con esta entrega serán British Petroleum (BP), Shell, Gulf, Vitol y World Fuel Services (WFS), entre otras.
Opinión:
Y vuelven con la MENTIRA insultante del «beneficio a los pasajeros» para justificar la entrega a trasnacionales de negocios que pertenecen a la nación. Lo mismo decían de la apertura del mercado de las gasolinas a particulares y la liberalización de los precios, ¿recuerdan? A casi un año de esa liberalización, la gasolina está MÁS CARA QUE NUNCA y las empresas extranjeras invasoras, las mismas que obtendrán el negocio de la turbosina, están risa y risa mientras gran cantidad de imbéciles mexicanos las enriquecen.
Peor aún, vuelven a insultar nuestra inteligencia al acusar de «monopolio» a una empresa paraestatal que, por definición, pertenece a todos los mexicanos y de suyo no puede ser «negocio de uno solo». Asunto muy distinto es que el Estado esté secuestrado por ladrones, corruptos y asesinos, problema añejo que los mexicanos no han querido resolver. Esa apatía le ha costado y le sigue costando mucho a México. ¡Prácticamente toda su riqueza!
Con información de El Economista y Forbes