Judith Amador Tello
Proceso
MÉXICO, D.F. (proceso.com.mx).- Durante un recorrido con medios de comunicación por los recientes trabajos de limpieza y restauración en la Catedral Metropolitana, José Alfredo Saldaña, subdirector de Obras de Restauración de la Dirección General de Sitios y Monumentos del Patrimonio Cultural del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), anunció que el próximo 2015 se construirá un museo de sitio ahí.
Para ello se invertirá un monto de 16 millones de pesos. El museo se ubicará en la zona de la Curia y albergará los objetos que se encontraron durante las obras de restauración de la Torre Poniente, “cuando se encontró una caja de plomo con una cápsula del tiempo que incluye monedas y pergaminos, además de exhibir objetos de valor histórico y artístico de la misma Catedral y piezas prehispánicas encontradas en el inmueble”.
Así lo detalló Saldaña, aunque dijo que si bien se planea que el recinto museográfico esté terminado en 2015, hay otras acciones “más urgentes” que deberán llevarse a cabo durante el año próximo, entre ellas la restauración y consolidación de la portada principal, cuyos elementos de cantera han sufrido desprendimientos y exfoliaciones. Algunos de ellos incluso deberán ser sustituidos.
Para la portada principal se invertirán 20 millones de pesos, informó el funcionario a través de un comunicado del Conaculta.
Se hizo un balance de los trabajos de conservación realizados durante el 2014, en los cuales se invirtieron 2 millones de pesos. Entre las acciones Saldaña destacó el retiro de flora parásita en todo el inmueble, cuyas dimensiones son de más de 7 mil metros cuadrados.
Explicó que estos laboriosos trabajos se hacen en forma manual, con un equipo de alpinistas que al retirar las plantas colocan herbicida con el propósito de evitar que renazcan. Posteriormente se sella y consolida la cantera.
El trabajo es sumamente necesario porque las plantas crecen entre las juntas de las piedras y sus raíces pueden ir aflojándolas con el tiempo al punto de ocasionar desprendimientos que podrían resultar en un riesgo para los visitantes del recinto religioso, el más importante de América.
Otros trabajos de mantenimiento fueron la repavimentación en el atrio, restauración de los portones del Sagrario Metropolitano, que está contiguo a la Catedral, así como del mueble del Cabildo que albergó los libros del coro. Igualmente se renovó el aplanado y la pintura de la Antigua Capilla de Ánimas.
La Dirección General de Sitios y Monumentos del Patrimonio Cultural cuenta con la asesoría del Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México para los trabajos de conservación de la Catedral, que se realizan con el inmueble en operación. No se cierra.
Saldaña reiteró también que la Catedral Metropolitana se encuentra estable y en monitoreo permanente (tiene una enorme plomada en la nave central desde hace décadas). Recordó que en 1989 presentaba un hundimiento diferencial de 2.40 metros.
Con los trabajos de corrección geométrica encabezados por el arquitecto Sergio Zaldívar Guerra y realizados con asesoría de un grupo de expertos, se logró revertir el hundimiento en 90 centímetros. Posteriormente se le aplicaron inyecciones de mortero y ahora se reporta estable.
En otro comunicado, el Conaculta informó que en 2014, luego de dos años de trabajo, se concluyó la restauración del Órgano de la Epístola de la Catedral Metropolitana, reinaugurado en marzo pasado con un concierto a cargo de los músicos Jürgen Essl, de Alemania, y Andrés Cea Galán, de España.
Los trabajos se hicieron con apoyo de la Fundación Alfredo Harp Helú, expropietario de Banamex.
“Los órganos del coro de la Catedral son un magnífico ejemplo de los instrumentos construidos en el siglo XVIII, pues se trata de dos instrumentos que a lo largo de los años sufrieron los daños por las filtraciones de agua, contaminación ambiental, incendios y trabajos de restauración en el inmueble”, destacó el Conaculta.