Sonia Del Valle, Rolando Chacón y Carlos Marí
Reforma
Cd. de México (11 noviembre 2014).- El uso que alumnos de primaria dan a las tabletas y computadoras portátiles entregadas por el «gobierno» federal es muy limitado en las aulas, por lo que las que siguen funcionando se utilizan más para jugar.
Martín recibió al inicio del ciclo escolar una tableta, envuelta en una caja de cartón, a la cual ya le pegó una estampa de «Bob Esponja». La guarda en una funda que compró en un puesto de periódico.
Es hábil con la tableta, su dedo índice vuela para abrir una y otra aplicación; y a la hora de escribir, sus pequeños dedos rozan las letras que aparecen en la tableta a gran velocidad.
Martín dice que está encantado, y que las clases que más le gustan en la escuela Ejército Nacional, en Coyoacán, son las de la tableta, pero no todos los días la usan.
«La traemos dos veces a la semana, martes y viernes, los demás no», señala.
Melina, al igual que todos los alumnos de quinto de primaria en la escuela Diego Rivera, en San Juan de Aragón, también recibió un tableta este ciclo escolar, la cual llevan sólo cuando la maestra les indica.
«La llevamos sólo cuando nos dice la maestra, y a veces en una semana la llevamos dos o tres días», explicó.
Ante el poco uso que dan a los aparatos en clase, alumnos de Sonora han optado por descargar juegos y navegar por la red. De manera limitada las usan para trabajos escolares.
«La traigo a la escuela todos los días. El profe no nos las pide pero la traemos y a veces no la usamos», señaló Andrés, alumno de la primaria Alberto Gutiérrez, ubicada el centro de Hermosillo.
Y es que aunque podría emplearse para hacer las tareas, los maestros prefieren que sean con lápiz y en cuaderno.
«La traigo el martes y viernes, nos metemos a la mi.compu.mx, nos ponemos a leer los cuentos; hay veces que no me dejan hacer tarea en tableta, tiene que ser en el cuaderno y el libro», dijo Eduardo, un alumno de la escuela Vicente Guerrero, de la Colonia Palo Verde.
En la Vicente Guerrero la tableta representa una divertida plataforma de juegos, y aunque en la escuela no cuentan con internet, los estudiantes se las ingenian para descargar juegos.
Tal es el caso de Eduardo, quien a sus 10 años ha descargado juegos como el Mine Craft, Plantas vs Zombies 2 y El Gato.Como es el único aparato en casa, lo usan por igual su padre, su madre y su hermana menor.
Aunque en su casa tiene una computadora, Ricardo, otro estudiante de la Vicente Guerrero, usa la tableta como plataforma para conectarse a Facebook e Instagram, pero también para jugar futbol.
«La uso para ver trabajos de historia y sepa qué más, y cuando la profe se va, agarro y me pongo a jugar FIFA», admite.
Sin embargo hay quienes ni en la escuela ni en su casa la pueden utilizar, pues los aparatos que les fueron entregados ya no funcionan.
«De 24 que recibimos una laptop, a 13 nos queda nuestra laptop, porque algunas les falla muy seguido la batería y ya no sirven», comenta Drianda, alumna de la primaria José Ochoa Lobato, en Villahermosa, Tabasco.
Asegura la SEP que cumple programa
Una o dos veces por semana llevan los alumnos de quinto de primaria las tabletas a las escuelas, aseguró Gabriela Rodríguez, directora de medios audiovisuales e informática, coordinadora del portal micompu.mx de la Subsecretaría de Educación Básica.
La funcionaria aseguró que el que los niños lleven todos los días la tableta a la escuela, «no va a asegurar que el aprovechamiento sea efectivo».
«Es necesario comprender el enfoque del programa, y eso lo hemos tratado de promover en la capacitación, que no queremos ni se pretende que la tableta sea una sustitución del cuaderno para que lo usen todos los días; debe tener un uso pertinente», expresó.
La funcionaria explicó que la tableta trae contenidos básicos precargados para que el maestro decida cuál es el mejor momento para utilizarlo, pero también trae aplicaciones con las cuales pueden hacer sus proyectos.
«El uso que hacen de los contenidos precargados permite que los alumnos desarrollen las competencias digitales», explicó.
Señaló que es decisión de cada escuela el día en que los alumnos lleven la tableta.
«Si en la decisión del consejo técnico escolar está haber decidido que los jueves y los martes, o los lunes y viernes, tiene una intención didáctica, y está considerada en los programas», expresó.
Cuestionada sobre las metas que esperan lograr con el programa en relación al aprendizaje de los alumnos, dijo no estar en condiciones de proporcionarlas, pero aseguró que esa información está disponible en el portal de la SEP.
«En internet en el Acuerdo 592 hay una sección que habla de Estándares Digitales, esos son los definidos», explicó.
De acuerdo con los Estándares de Habilidades Digitales, los alumnos de quinto de primaria que recibieron una tableta, entre otras cosas, deben ser capaces de realizar trabajos colaborativos con alumnos del mismo grupo de edad en al menos una escuela indígena, una escuela en un ambiente geográfico diferente y escuelas en Latinoamérica, Estados Unidos, Asia y Europa.
Además deben tener la capacidad de debatir el efecto de las tecnologías existentes y emergentes en los individuos, la sociedad mexicana y la comunidad mundial.
Respecto al robo de los equipos y fallas técnicas, tanto Rodríguez como Mario Guzmán, encargado de la operación del programa de Inclusión y Alfabetización Digital, dijeron desconocer estas cifras.
Aunque reconocieron que han tenido algunos robos, que al ser reportados se bloquean de inmediato los equipos.
«Hasta ahorita tenemos bloqueadas más de 300 (laptops)», expresó Guzmán.
En el caso de las tabletas, Rodríguez dijo desconocer los datos de robo o fallas técnicas.
Al ser cuestionados sobre cómo va a crecer el programa, en qué estados, y cuántas tabletas se entregarán en los próximos años, ambos funcionarios señalaron que es una información que desconocen, pues eso depende de los recursos que autorice cada año la Cámara de Diputados.
Sobre la evaluación del uso de las laptops en los primeros tres estados donde se entregaron en el ciclo escolar pasado, dijo, que la realizó el Banco Interamericano de Desarrollo, la cual desconocen.
«No conozco la versión final», expresó Rodríguez.
