México, 29 de junio 2018 (NOTIGODÍNEZ).- El régimen usurpador del priista Enrique Peña Nieto, acelera la privatización de yacimientos petroleros y el incremento de la deuda de Petróleos Mexicanos (Pemex), ante un eventual triunfo de Andrés Manuel López Obrador, candidato presidencial de la coalición «Juntos haremos historia», en los comicios del próximo domingo 1 de julio.
Así lo reveló la agencia internacional Bloomberg, exhibiendo la estrategia del agonizante régimen peñista para buscar nuevos «socios» en al menos siete yacimientos petroleros en tierra firme, además de preparar el anuncio de un nuevo endeudamiento de la petrolera por 3 MIL 500 MILLONES DE DÓLARES.
Citando información de la mencionada agencia, el portal Sinembargo informó que el régimen peñista nombró a un nuevo directivo encargado de negocios de Pemex, con el fin de apresurarse a entregar los mencionados yacimientos y otras áreas ricas en gas e hidrocarburos.
Se trata de Jorge Lomelín Delgadillo, nombrado el pasado 22 de junio como nuevo director corporativo de Alianzas y Nuevos Negocios de la otrora paraestatal. ¿Su misión? Apurar la subasta -literalmente- de 37 áreas en tierra y nueve zonas en la Cuenca de Burgos, rica en gas de esquisto, a más tardar para el 27 de septiembre, así como acuerdos “farmout” de siete áreas en tierra con Pemex el 31 de octubre.
La dirección de la petrolera mexicana, encabezada por Alberto Treviño Medina, también está modificando las condiciones para la explotación de yacimientos marinos que no consiguió atraer interés hace un año y evaluar el potencial de asociaciones operativas o “farmouts” el próximo año de otras cuatro áreas terrestres y siete bloques exploratorios terrestres.
Todo ello con el fin de dar continuidad a la contrarreforma energética e impedir que un eventual gobierno de López Obrador, ponga fin a la entrega de la riqueza petrolera pese a que no echará atrás las concesiones ya otorgadas a empresas nacionales y extranjeras.
Bloomberg recordó que una de las promesas del tabasqueño ha sido la suspensión de nuevas subastas de petróleo, revisión de contratos ya otorgados y congelación temporal de los precios del combustible. Dichos planes entorpecen la agenda del régimen usurpador peñista que pretende acelerar la invasión de trasnacionales energéticas.
Por otra parte, Pemex podría anunciar en julio próximo tres acuerdos de asociación en refinerías lo que significaría un endeudamiento por un total de hasta 3 mil 500 millones de dólares.
La intención es llevar a cabo todo esto antes del cambio de gobierno el 1 de diciembre próximo, particularmente si Andrés Manuel López Obrador consigue el triunfo electoral.
Opinión:
Y aunque AMLO no fuera ganando, la agenda de estos vendepatrias sería exactamente la misma: acelerar el entreguismo, el desmantelamiento de Pemex y su venta pieza por pieza. Para eso se han venido robando la Presidencia desde 1988 y se les ha hecho tarde por acabar con el país.
Por cierto, quienes piensen que López Obrador echará atrás la contrarreforma energética y el saqueo de nuestro petróleo, se equivocan. Su operador Alfonso Romo ha estado pregonando lo contrario.
Con información de Sinembargo