Norma Trujillo Báez
La Jornada
Cuando el titular de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema), Víctor Alvarado Martínez, definió que la biodiversidad de Veracruz ha sufrido una transformación muy grave, del 90 por ciento del territorio, a consecuencia del cambio de uso del suelo por la agricultura y la ganadería principalmente, pero que el gobierno trabaja por las áreas naturales protegidas, pobladores del norte del estado que han sido afectados por los derrames de Pemex y ambientalistas le exigieron que no le dé vueltas al asunto y diga no a la técnica del fracking.
En el Museo de Antropología de Xalapa, se inauguró el Foro Derechos Humanos y Patrimonio Biocultural, organizado por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), en coordinación con la Universidad Veracruzana (UV), el Centro Mexicano de Derechos Ambiental (Cemda) y la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH).
Se incluyeron temas como: Política pública cultural y ambientalmente aceptable; El patrimonio biocultural a la luz de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y el Estado multicultural y Experiencias de la sociedad civil en la defensa del patrimonio biocultural de México.
Precisamente en el primer panel, el secretario del Medio Ambiente precisó que en Veracruz hay 20 áreas naturales protegidas por el estado y 15 áreas naturales por la Federación, que se ha avanzado con el decreto del área Metlac-Río Blanco, que hay atención a la reserva de la Biósfera de los Tuxtlas; que hay un proceso de ordenamiento territorial.
También dijo que desde la administración se impulsan diversas estrategias de manera transversal como el Fondo Ambiental Veracruzano, al cual se canalizan recursos importantes provenientes de la verificación vehicular y que a su vez aterrizarán en las comunidades y en beneficio de quienes habitan en los espacios protegidos.
El funcionario destacó además que las estrategias que ejecuta el estado para combatir y mitigar el cambio climático, se llevan a cabo de manera transversal a través de las dependencias estatales y que tienen que ser obligatoria.
En el tiempo de preguntas y respuestas, un joven le increpó al funcionario y le dijo “ ustedes dicen que los extranjeros tienen que venir a invertir porque la gente ya no quiere trabajar, claro que la gente quiere trabajar, lo que pasa es que la gente quiere que su trabajo se vea compensado, que a final de cuentas no se protegen los mercados locales” y puso de ejemplo el precio de la caja de mangos que fue de 15 pesos en la reciente cosecha, por lo que dijo “desde ahí que vengan a decirnos que hay un interés del gobierno por el desarrollo y por el cuidado ecológico, nosotros no estamos viendo una política real en relación con el desarrollo del campo”.
También, el maestro de la Universidad Veracruzana Intercultural del Totonacapan, Óscar Espino, se inconformó contra la técnica del fracking, y dio a conocer que hace un mes en Emiliano Zapata por una turbina que estuvo funcionando las 24 horas y hubo un derrame, 10 familias fueron sacadas del pueblo , Pemex puso una ambulancia porque las personas fueron intoxicadas.
Asimismo dijo que en El Chote, donde vive él, hace dos meses hubo una explosión “y así estamos sobreviviendo”. Alvarado Martínez quiso dar respuesta con evasiones a los problemas.
Mientras que para el maestro de la UVI, solo dijo que la utilización de la técnica de extracción del gas es un instrumento federal, no hay un estudio que pueda definir que proceso del fracking perjudica o no, “yo no puedo rebasar el marco normativo, vamos dar una respuesta con el marco normativo”. Fue cuando gran parte de la audiencia le exigió al funcionario que diera un no, que no hubiesen dobleces. La maestra de ceremonias se apresuró a indicar que por tiempo concluía el panel.