México, 26 de febrero 2016 (NOTIGODÍNEZ).- El colectivo de activistas «Okupas», que desde hace varios años mantiene el control del auditorio Justo Sierra –mejor conocido como «Che Guevara»– de la Facultad de Filosofía y Letras (FFyL), denunció que la «Procuraduría General de la República» (PGR) del régimen usurpador de Peña Nieto, prepara más detenciones contra sus integrantes, por lo que solicitaron «apoyo solidario» de la comunidad universitaria y toda la ciudadanía.
En efecto, de acuerdo con el diario La Jornada, la propia rectoría de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en poder de Enrique Graue Wilchers tras la designación del priista José Narro como «secretario de salud», confirmó que hay abiertas más averiguaciones previas contra integrantes del colectivo.
A través de un comunicado citado por La Jornada, «Okupas» demandó la liberación inmediata de su compañero Jorge Emilio «Yorch» Esquivel Muñoz, a quien agentes de la PGR detuvieron con violencia la noche del 24 de febrero. La dependencia usurpada por Arely Gómez –vinculada a la criminal empresa Televisa– acusa a Jorge Emilio de «narcomenudeo», pero sus amigos y compañeros denuncian que se trata de un montaje.
De hecho, tanto el colectivo «Okupas» como otros universitarios han señalado que la detención de Esquivel Muñoz forma parte de una ofensiva «oficial» que data desde hace varios años, con la que se pretende aterrorizar a los estudiantes, criminalizar la lucha social y sobre todo desmantelar al grupo que mantiene ocupado el auditorio Che Guevara de la FFyL, uno de los más grandes y emblemáticos de Ciudad Universitaria.
La Jornada recordó que ese auditorio fue ocupado por estudiantes el 4 de septiembre de 2000, luego de que la extinta Policía Federal Preventiva ingresara al campus universitario por órdenes del sanguinario Ernesto Zedillo, para reventar la huelga estudiantil contra el nuevo reglamento general de cuotas que liquidaba la gratuidad de la universidad.
Desde entonces, el Che Guevara se convirtió en centro de apogeo del activismo universitario. No obstante, según testimonios recabados por La Jornada, no toda la comunidad está de acuerdo con que el auditorio sea controlado por ese grupo. «Estudiantes y maestros consultados por este medio manifestaron su molestia con la ocupación del auditorio, que ya tiene más de 15 años», señala el diario en su nota.
Con información de La Jornada
