Arturo Sánchez Jiménez
La Jornada
Entre 2000 y 2010 la esperanza de vida de los varones mexicanos disminuyó un año a causa de la violencia y otros factores, revela un estudio de Víctor Manuel García Guerrero, profesor investigador de El Colegio de México, quien expuso su trabajo en la 12 Reunión Nacional de Investigación Demográfica en México, la cual se celebra en la Universidad Iberoamericana.
García Guerrero, doctor en estudios de población, presentó la investigación El estancamiento de la esperanza de vida en México en la primera década del siglo 21: el impacto de las muertes violentas, que hizo con Vladimir Canudas Romo, investigador de la Universidad del Sur de Dinamarca y del Centro Max-Planck Odense.
En entrevista, el investigador explicó que la esperanza de vida al nacer de los mexicanos creció desde mediados del siglo pasado y al final llegó a 73. Luego, entre 2005 y 2010 quedó en 72.
Al analizar las causas de este cambio, con base en información censal y estadística, los investigadores encontraron que la reducción en el caso de los varones era producto de diversos factores, además de la violencia, como la diabetes o las enfermedades del corazón.
Observaron que en la década pasada los homicidios por sí solos restaron más de seis meses a la esperanza de vida de los hombres, de acuerdo con los cálculos realizados en este estudio.
“Es ingenuo pensar que íbamos a seguir con el mismo ritmo de crecimiento de la esperanza de vida que en las décadas anteriores, pero si los indicadores de 2000 se hubieran mantenido iguales, en la década pasada la esperanza de vida habría ganado dos años, en lugar de perder uno”, consideraron.
Los investigadores analizaron lo que llaman “contribuciones positivas y negativas a la esperanza de vida”, es decir, aquellas variables que aumentan o disminuyen el tiempo estimado que una persona puede existir.
“Encontramos que en las edades medias, entre los 15 y 50 años, había una contribución negativa considerable. Entonces nos empezamos a preguntar por las causas. Encontramos que los homicidios eran la principal causa de decremento en la esperanza de vida de los hombres.”
En conjunto, según los resultados presentados por García Guerrero, los homicidios y la diabetes disminuyeron la esperanza de vida de los varones mexicanos un año.
La esperanza de vida, explicó el investigador, es un buen termómetro de la mortandad en el país. Consideró que si “ya estamos llegando al punto en el que se requiere de un gran esfuerzo y de tecnología para ganar esperanza de vida, es importante observar que las políticas nos están llevando a perderla”.
Diabetes, otro factor
Otro trabajo expuesto en la Reunión Nacional de Demografía llega a conclusiones semejantes. Guillermo González Pérez, académico de la Universidad de Guadalajara, en su investigación Violencia homicida y esperanza de vida en México, encontró que el promedio actual de esperanza de vida de los hombres mexicanos, que en este caso considera que es alrededor de 73 años, se está reduciendo en 0.84 años a causa de los homicidios. La cifra casi es casi igual al 0.85 provocado por la diabetes, principal causa de muerte en nuestro país.