Y lo mismo de siempre: la sanción es una «multa», es decir, una tajada para las «autoridades» de todo lo que obtuvo delinquiendo.
Reuters
Reguladores estadounidenses multaron este lunes a Merrill Lynch, una unidad de Bank of America Corp, con un total de 6 millones de dólares por violar normas de ventas cortas diseñadas para evitar la manipulación de mercados.
En una venta corta, el operador toma prestado activos y luego los vende, para posteriormente comprarlos a un precio menor, pagar su obligación y conseguir así una ganancia.
Si una de las partes en la transacción no tiene suficiente efectivo para pagar la posición o los activos subyacentes que deben cancelarse, el resultado es una «posición que no logró concretarse» y que debe ser cerrada con créditos o con la compra de valores de igual tipo y cantidad.
La Autoridad Regulatoria de la Industria Financiera (FINRA, por sus siglas en inglés) dijo que, entre septiembre del 2008 y julio del 2012, Merrill Lynch Professional Clearing Corp no hizo el intento de cerrar algunas posiciones que no pudieron ser concretadas, y que carecía de los sistemas y procedimientos necesarios para cumplir con los requerimientos durante gran parte de ese periodo.
El regulador también denunció los sistemas de supervisión y procedimientos de Merrill.
«El hecho de que la firma no haya establecido sistemas o procedimientos para cerrar apropiadamente posiciones que no pudieron concretarse podría haber tenido, potencialmente, un impacto negativo en el mercado, que pudo haber perjudicado a inversores», sostuvo Brad Bennet, alto funcionario de FINRA.
En junio, FINRA había multado a Merrill con 8 millones de dólares, y la compañía accedió a devolver 24.4 millones de dólares a clientes para resolver acusaciones de que cobró excesivamente a más de 47,000 cuentas de jubilación y organizaciones de caridad que invirtieron en fondos mutuos.