México, 2 de septiembre 2016 (NOTIGODÍNEZ).- “Controla los alimentos y controlarás a la gente; controla el petróleo y controlarás las naciones; controla el dinero y controlarás el mundo” dijo el infame inhumano Henry Kissinger.
Por su parte, el genocida usurpador de la presidencia, Enrique Peña Nieto, lidera un régimen criminal y simulador que no busca establecer el dominio determinado por Kissinger, sino que México sea una nación lacaya, dominada por la burguesía nacional e internacional.
Por tal razón el delincuente plagiador, Peña Nieto, ha reducido el presupuesto a agricultura y alimentación, así como privatizó tanto el petróleo como nuestras playas, y hasta intenta privatizar la educación pública, lo cual ha sumergido al país en una crisis financiera. Pero eso sí, este año se aumentó, otra vez, el presupuesto para sus gastos personales.
De acuerdo con el portal Proceso, la organización ambiental Greenpeace denunció que el régimen criminal del asesino de Atenco, Enrique Peña Nieto, recortó 2 veces este año el presupuesto destinado a agricultura y alimentación.
El recorte fue por un total de más de 7 mil millones de pesos, de acuerdo a la organización.
Esto “desmiente que el impulso al campo sea una de las prioridades del gobierno” porque “afectan directamente programas destinados a promover la pequeña y mediana agricultura”, aseveró Greenpeace.
Además, Greenpeace mencionó que el “Programa de Incentivos para Productores de Maíz y Frijol” (PIMAF), al que el desgobierno destinó 1,437 millones de pesos durante el primer semestre de 2016, consiste en entregar paquetes “tecnológicos”, los cuales contienen “semillas, fertilizantes y plaguicidas tóxicos, que afectan el agua, el suelo y la salud de las personas, beneficiando sólo los bolsillos de las empresas que los producen”.
Asimismo la organización señaló que no se menciona una futura actualización del Registro de Emisiones y Transferencia de Contaminantes” (RETC). El RETC es un instrumento que brinda información sobre emisiones contaminantes de la industria sobre las sustancias tóxicas. Y denunció que tanto el “Congreso” como el “gobierno federal” no han propuesto la elaboración de una ley que garantice el derecho humano al agua, mismo que se incluyó en la Constitución en 2012.
La alarmante situación de México en materia política, social, económica y ambiental tiene “una larga lista de focos rojos que sobrepasa las ‘cosas buenas’ que el gobierno presume” en su cuarto informe, denunció Greenpeace.
Hay que recordar que desde la implementación del atroz neoliberal Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN, o NAFTA por sus siglas en inglés) han quebrado más del 72% de los campesinos mexicanos y México ha perdido su soberanía alimenticia, lo cual deja a la nación débil y en riesgo.
Estas son las políticas neoliberales que, junto a la burguesía tanto nacional como internacional, el genocida Peña Nieto intenta seguir implantando a fuego, sangre y miseria.
El pueblo urgentemente necesita despertar para correr al genocida Enrique Peña Nieto, y así poder establecer un sistema que beneficie al pueblo y no a una elite criminal a la cual el usurpador sirve.
Con información de Proceso