México, 3 de enero 2017 (NOTIGODÍNEZ).- El incremento al precio de las gasolinas provocará a su vez el alza generalizada a todo tipo de productos y servicios que dependen directa e indirectamente de ese importante insumo, informaron analistas y líderes transportistas.
Desde la canasta básica hasta el transporte público, e incluso servicios de embrutecimiento (televisión) de paga —el colmo del desquicio: pagar por enajenarse—, subirán próximamente de precio por efecto del mega-gasolinazo aplicado por el régimen usurpador del asesino de Atenco, Enrique Peña Nieto, desde el primer minuto de este año.
Por tanto, el «aumento histórico» al salario mínimo de 7 pesos, anunciado con bombo y platillo en fechas recientes por el régimen peñista, ha quedado totalmente anulado.
Víctor Zendejas Orozco, líder de la agrupación ambientalista Franature Mahatma Gandhi, alertó que el aumento a las gasolinas repercutirá en las tarifas de transporte público y de carga, afectando con ello a los precios de los alimentos.
«No puede esperarse otra cosa más que alzas en todos los productos básicos, desde la leche hasta la tortilla, pasando por las verduras, huevo y demás, así como un creciente descontento social», advirtió.
Asimismo, señaló que uno de los argumentos esgrimidos por el régimen usurpador para defender el gasolinazo —que coadyuva a mejorar el medio ambiente— es mentira, pues las recientes contingencias ambientales en el centro del país demuestran que el alza ni siquiera sirve como paliativo.
Al gasolinazo súmese la devaluación creciente que encarece muchos productos importados o dependientes de materias primas compradas al exterior, empezando por la propia gasolina y más de la mitad de los alimentos básicos que consumen los mexicanos.
Por su parte, Noé Benítez Espinosa, dirigente de la Alianza Nacional de Prestadores de Servicios y Autotransporte (ANPSA), consideró inevitable un alza en las tarifas del transporte público tras el aumento a la gasolina.
El líder transportista señaló que, por ejemplo, los taxistas de la Ciudad de México ya solicitaron un incremento de entre 5 y 20 por ciento a la tarifa. De la respuesta a la petición se determinará cómo reaccionarán transportistas de otros sectores.
Aunque no se tiene un estimado real de cuánto podrían subir las tarifas, Benítez coincidió con Zendejas Orozco en el sentido de que todos estos incrementos sólo agudizarán el malestar e inconformidad social.
«Lo que es un hecho es el malestar de los ciudadanos, que verán como se hace polvo el aumento a las percepciones mínimas y la molestia parece ir en ascenso», alertó.
Este lunes 1 de enero, entró en vigor el mega-gasolinazo anunciado por el régimen usurpador la semana pasada. La gasolina Magna, de mayor consumo entre la población, registró un incremento de 14.2 por ciento en promedio, vendiéndose ahora en 15.99 pesos por litro; la Premium se incrementó 20.1 por ciento, quedando en 17.79 pesos, y 16.5 por ciento para el diéseel, vendiéndose en 17.05 pesos por litro.
Los precios arriba mencionados son sólo promedios, ya que las tarifas varían según las zonas territoriales definidas por el régimen usurpador.
Con información de Milenio
