¡Negociazo redondo esto del «No Circula»! Ganaron las automotrices (todas extranjeras), ganaron los bancos con los creditos de auto, ganarán las aseguradoras (que de hecho pertenecen a los bancos, así que doble ganancia para ellos)… todo es más prosperidad y jugosos «business» para los ricachones de siempre, ¿a costa de quién? Pues de la prole idiota que los enriquece.
Juan Carlos Cruz Vargas
Proceso
MÉXICO, D.F. (apro).- Pese a que la venta de vehículos nuevos se disparó 13.7% anual en septiembre pasado, lo que marcó un nivel récord, los representantes de la industria automotriz no echaron las campanas al vuelo y alertaron que esas tasas de crecimiento pueden ser reversibles.
En rueda de prensa conjunta, el director general adjunto de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), Guillermo Rosales, y el presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), Eduardo Solís, alertaron también sobre la baja penetración del crédito bancario, lo cual es un obstáculo para el consumo de autos.
Solís fue claro: “Además de señalar que hay una década perdida en el mercado interno, estar vendiendo autos con un crecimiento de dos dígitos, pero que nos lleva a ventas similares a las de hace 10 años no es para echar ninguna campana al vuelo. Estamos vendiendo lo que vendíamos hace 10 años”.
Comparó que mientras Brasil vende 19 unidades y Argentina 23 por cada mil habitantes, México vende apenas nueve por cada mil habitantes. “Nuestro país debería tener una venta similar a dos millones de unidades, pero no un millón 100 mil como probablemente vamos a tener este año”, aseguró.
Guillermo Rosales, director general adjunto de la AMDA, explicó que en el tercer trimestre de este año se comercializaron 289 mil 208 unidades, cantidad 14.2% más que lo registrado en igual periodo de 2013. Dijo que estas cifras que no se alcanzan desde 2007, lo cual motiva a un mayor optimismo.
“En abril ajustamos nuestros pronósticos de crecimiento ante las malas cifras del primer trimestre, pero ahora tenemos una mayor perspectiva y optimismo de cerrar con una venta de un millón 120 mil autos nuevos”, precisó.
Por su parte, Eduardo Solís, presidente de la AMIA, enfatizó que estas ventas fueron motivadas por subsidios del gobierno y facilidades de las armadoras, lo que no es sostenible en el largo plazo.
“Esto es preocupante porque se puede volver a caer en ventas, por lo cual se tienen que realizar ajustes en materia fiscal que nos apoyen a elevar las ventas y frenar el ingreso de unidades usadas de Estados Unidos”, alertó.