Redacción La Jornada
La tormenta tropical Dolly se hizo sentir en la capital del estado, mientras el tráfico se convertía en un calvario. Los cierres vehiculares en diferentes puentes coyunturales, causados por la inundación parcial de las calles, hicieron que cientos de potosinos debieran abandonar las unidades de transporte público, detenidas en medio del agua o en las partes altas de los puentes que cruzan las vías ferreas.
En el río Santiago, en su parte soledense, fue necesario que efectivos de la Policía Municipal y Estatal, junto con Protección Civil, rescataran a varias personas de vehículos que, por la crecida repentina, se quedaron atascados, además de dos camiones urbanos que debieron ser remolcados por grúas.
Las zonas más afectadas son la zona oriental, geográficamente más baja, y la parte norte, antiguamente un escurridero natural hacia el río Santiago.
Los puentes de Eje Vial, Constitución, Damian Carmona, Hernán Cortés, alameda central y avenida Universidad se convirtieron en estacionamientos ante el congestionamiento que sufrieron al cerrarse los puentes de Pemex, río Españita, el puente Naranja y el puente Othón.
La avenida Salvador Nava se reportó sólo con incidentes menores, fruto de derrapes en las laterales, las cuales, en ciertos puntos, debieron ser también cerradas por acumulación de agua. De la misma forma, la Avenida Chapultepec registró una crecida que, si bien duró sólo unos minutos, fue suficiente para cerrar el paso de buena parte del tráfico en el sur.
Por su parte, la Policía Vial recomendó a la población en general, a través de redes sociales, que no salieran de sus casas a menos que fuera necesario, ya que las lluvias, se pronosticaba, continuarían durante la noche de ayer y buena parte de hoy.
El desagüe se vio rebasado: Cabrero
No fue falta de desazolve, sino precipitaciones de un volumen mayor a la capacidad del desagüe, lo que provocó la anegación de varias zonas de la ciudad, justificó el director de Protección Civil Estatal, Gerardo Cabrero Olivo, quien se encuentra en la Huasteca supervisando el actuar de las unidades municipales en aquella región.
Si bien en la Huasteca no han tenido la afectación temida en un principio, advirtió el funcionario que no se confían, pues ya se tuvo un deslave ligero en la carretera que va de Xilitla a Arroyo Seco, en el estado de Querétaro, y que por eso mantendrán una vigilancia permanente tanto en ríos como en carreteras, las cuales se patrullarán para reportar o auxiliar en caso de accidentes o derrumbes.
“Los organismos municipales se encuentran en sesión permanente hasta que pase la contingencia. Ya se tienen albergues listos para que, en caso de ser necesario, se evacúen las zonas cercanas a los ríos. Afortunadamente la falta previa de lluvias ha permitido que el agua sea absorbida rápidamente por la tierra, pero, de seguir lloviendo con este ritmo, podría llegar a ser necesario tomar medidas de precaución”, indicó.
Respecto a la situación en la capital, reiteró que los desazolves en los colectores pluviales se hicieron a tiempo, y que fue ya una cuestión de infraestructura rebasada lo que causó el caos vial de ayer por la tarde. Además, señaló que también se encuentran monitoreando las colonias de las zonas bajas del área conurbada, ya que el nivel del agua se mantiene a ras de banqueta, y sólo haría falta una precipitación más fuerte para que hubiera que evacuar esos sitios.