Norma Trujillo Báez
La Jornada
Xavier Martínez Esponda, director de la Oficina Golfo del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda), consideró que las Áreas Naturales Protegidas (ANP) están perdiendo su objeto fundamental de conservación frente a proyectos de desarrollo que no son sustentables, como se ve con la recién autorización otorgada por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) al proyecto que dinamitará parte de la Reserva de los Tuxtlas para llevar roca basáltica hacia la obra de ampliación del Puerto de Veracruz, por ello, organizaciones en defensa del Medio Ambiente recurrirán legalmente contra las autorizaciones otorgadas.
Ante tales autorizaciones, el Cemda y la Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente calificaron de preocupante la autorización otorgada por la Semarnat al proyecto que dinamitará parte de la Reserva de los Tuxtlas. Martínez Esponda, dijo que esto contraviene el derecho a un medio ambiente sano consagrado en el artículo 4° de la Constitución, el Convenio de Diversidad Biológica, la Convención Ramsar, la Convención para la Protección de la Flora, Fauna y las Bellezas Escénicas Naturales, “las autoridades no están respetando estos derechos”.
En un comunicado, Sandra Moguel, abogada de la Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente (AIDA), señaló que la resolución de la Semarnat desconoce el principio de no regresión, recogido por la Política Nacional de Humedales, publicada por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) el 2 de febrero de 2014. Esto porque la autorización de dinamitar recursos naturales en área protegida afecta los estándares de protección ya adquiridos.
Además, “esta decisión viola el compromiso internacional de México sobre conservar la biodiversidad y sus humedales en su territorio, adquiridos al ratificar la Convención de Diversidad Biológica y la de Humedales de Importancia Prioritaria Internacional Ramsar”.
La autorización violenta el marco jurídico a pesar de que la autoridad argumente que se haya reducido el área, el tiempo y el volumen de roca a explotar. “La autorización constituye un pésimo precedente para que se pueda continuar explotando en la reserva de la Biósfera de Los Tuxtlas; ello en contraposición a los procesos de recuperación y la resiliencia de sus ecosistemas y el esfuerzo y voluntad de los habitantes del lugar por defenderlos”.
A pesar de que la comunidad científica nacional e internacional ha alertado oportunamente a la Semarnat sobre los riesgos del proyecto Aprovechamiento y explotación de roca basáltica del banco ubicado en el ejido Balzapote, municipio de San Andrés Tuxtla, el 26 de junio se dio a conocer que la dependencia aprobó el proyecto.
En el análisis suscrito por más de 300 científicos y entregado en abril del presente año a la Semarnat, se señala que “este proyecto, que pretende extraer roca basáltica con el uso de explosivos dentro de la Reserva de la Biosfera Los Tuxtlas, afectaría negativamente el funcionamiento de los últimos reductos de selva alta perennifolia representativos del límite norte de distribución de este tipo de vegetación en América”.
En el análisis los especialistas señalaron que se trata de un área Natural Protegida desde 1998, en donde se llevará a cabo la explotación es en una zona de amortiguamiento destinada al aprovechamiento sustentable de los ecosistemas, en la cual se prohíbe explícitamente el uso de explosivos. Además, la desaparición-afectación de los pocos fragmentos de selva que aún quedan podría causar la extinción local de algunas especies o genotipos, añadiendo que la selva puede ser un hábitat relevante para las 115 especies de aves de la región que se encuentran en alguna categoría de riesgo.
Debido a lo anterior el análisis técnico del Manifiesto de Impacto Ambiental (MIA) del proyecto realizado por académicos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y de la Universidad Autónoma de Morelos, concluyó que “el proyecto afectará de manera irreversible la integridad biológica y socio-ecológica, así como los servicios ambientales que esta región ofrece a sus habitantes”. Los expertos entregaron su análisis a la Delegación de la Semarnat-Veracruz, que con esta decisión ignora las conclusiones.