Mathieu Tourliere
Proceso
MÉXICO, D.F. (apro).- Durante una reunión de la Organización del Tratado de Atlántico del Norte (OTAN) en Gales, el canciller estadunidense, John Kerry, anunció que a finales de septiembre diez países conformarán una coalición para “aniquilar” al Estado Islámico (EI) en Medio Oriente.
Liderada por Estados Unidos, la coalición integrará a Gran Bretaña, Francia, Alemania, Canadá, Italia, Polonia, Dinamarca, Australia, así como Turquía, el único país musulmán que formará parte de la coalición. Sin embargo, a la fecha ningún país árabe –como las monarquías sunitas del Golfo— ha manifestado interés por entrar a la coalición.
Al invadir Irak en 2003, George W. Bush conformó la “coalición de la victoria”, a la que ningún país árabe se agregó. A raíz de esto, Washington nunca consiguió el apoyo de los países de la región –ni siquiera de sus aliados– y la guerra resultó un desastre.
Para desmarcarse de su antecesor, el presidente Barack Obama declaró que John Kerry viajará pronto al Medio Oriente para “conseguir el apoyo para una confrontación militar con el Estado Islámico”.
Y añadió: “Resulta absolutamente crucial que los estados árabes –y en particular los estados de mayoría sunita— nos acompañen de manera activa en la batalla”.
“El Estado Islámico representa una amenaza significativa para la OTAN”, declaró más tarde Obama. Agregó que existe un consenso entre los aliados de Estados Unidos sobre la necesidad de “degradar y finalmente destruir el EI”.
Precisó: “(Nuestros aliados) están preparados para trabajar con nosotros y lograrlo”.
El mandatario estadunidense repitió con insistencia que Washington desarrolla una estrategia clara contra el Estado Islámico para reparar los daños que provocó su extraña confesión el pasado 28 de agosto, cuando reconoció: “No tenemos estrategia en Siria”.
Por lo tanto, hoy el canciller Kerry se mostró confiado en que la coalición derrotará al Yihad. “No son tan disciplinados como todos lo piensan”, afirmó. Dijo que la coalición “tiene la tecnología y el saber hacer” para aniquilar al Estado Islámico.
La coalición “cazará” a los terroristas y sus fuentes de financiamiento, insistió y detalló que la estrategia contempla un “aspecto militar total”. El funcionario anunció que la coalición llevará a cabo bombardeos “quirúrgicos”. Declaró: “Muchos se sienten incómodos con los operativos quirúrgicos. Lo entendemos”.
Y analizó: “En muchos sentidos, el EI representa una oportunidad de demostrar que podemos trabajar juntos, que nuestras capacidades de defensa no están congeladas en un viejo modelo en el que no podíamos responder al EI”.
Cooperación iraní
El líder supremo de Irán, el Ayatollah Khamenei, autorizó al comandante en jefe del ejército a cooperar con los militares estadunidenses y kurdos contra el EI, afirmó hoy la BBC. Recordó que Irán apoya las milicias chiítas en Irak quienes luchan contra el Estado Islámico.
El Ministerio de Asuntos Exteriores iraní se apresuró a negar dicha información. Argumentó que el gobierno iraní criticó los bombardeos que llevó a cabo el ejército estadunidense en Irak.
Sin embargo, el gobierno iraní considera al EI como una amenaza muy seria para su frontera y para la estabilidad de sus aliados en la región –Irak y Siria–, ya que su doctrina, influenciada por el wahhabismo saudí, promueve el odio contra los chiítas y llama a masacrarlos.
Si bien resulta poco probable que ambos países reconozcan una alianza insólita, debido a la tensa relación que tienen desde la revolución iraní de 1979, los intereses de Estados Unidos e Irán convergen en la eliminación del Estado Islámico.