Luciano Campos Garza
Proceso
MONTERREY, N.L. (proceso.com.mx).- La diputada local panista Imelda Guadalupe Alejandro pidió al procurador estatal Adrián de la Garza, que no retire a los agentes ministeriales de los municipios del norte de la entidad, pues ya regresaron a esa la zona los robos de ganado, de maquinaria y a casas.
Además, demandó respeto al funcionario, quien tildó de “payasada” y “acto político” su petición y afirmó que actualmente hay personal de la Procuraduría desplegado en los municipios rurales de dicha área.
De acuerdo con Alejandro de la Garza, desde el 1 de abril, elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI) se retiraron de sus cuarteles en aquella región, como parte de una aparente reestructuración de la Procuraduría de Nuevo León.
Agregó que los alcaldes de los municipios Villaldama y Sabinas Hidalgo pidieron a De la Garza Santos que no removiera a los ministeriales, debido a que las policías preventivas de sus municipios no estaban aún capacitadas para trabajar dentro del nuevo sistema penal acusatorio, que comienza a ser empleado en la entidad.
En entrevista, la legisladora explicó que actualmente en los municipios de Anáhuac y Sabinas Hidalgo hay un repunte de delitos que habían sido abatidos, como plagio de ganado, robo en casas y sustracción de equipo agrícola en los ranchos.
El pasado 15 de septiembre, la legisladora acudió a la oficina del procurador y le llevó un mapa de Nuevo León, como una manera de exponerle la problemática de inseguridad que hay en el norte de la entidad.
En respuesta, el funcionario estatal reprochó la petición de la diputada, pues dijo que ya hay agentes trabajando en la zona.
“Lo que pasa es que nos hemos dado cuenta de la solicitud que hace y se nos hace estéril, en virtud de que hay elementos ministeriales en la zona norte. Se encuentran desplegados. Creemos que es estéril esto. Yo pienso que es un tema político, se me hace hasta una payasada”, denostó ese mismo día el procurador, e invitó a la legisladora a pedir audiencia por vías formales.
Alejandro de la Garza aclaró que el 1 de septiembre ya había pedido por oficio una cita pero fue ignorada.
La panista dijo en la sesión legislativa del miércoles, que para el procurador hay municipios de primera y de segunda, y que los legisladores son atendidos discrecionalmente por el procurador, de acuerdo a su filiación partidista, pues el mismo lunes cuando entregó el mapa, solicitó otra entrevista con De la Garza Santos, y hasta ahora no ha recibido respuesta.
La diputada Imelda, quien reside en Anáhuac, municipio fronterizo con Texas, ubicado a 220 kilómetros al norte de la capital, invitó al procurador a que resida durante una semana, sin escoltas, en esa localidad, para que constate las condiciones de inseguridad en la que viven sus pobladores.
Finalmente, la diputada lamentó las expresiones con que el funcionario estatal se ha referido a su solicitud de reforzar la seguridad en los municipios rurales.
“Utilizar algo tan serio como el llamado de auxilio de alcaldes y de ciudadanos de la zona rural para denostar, no es propio del procurador de Justicia de Nuevo León. Podremos disentir, pero señalar como una payasada lo que padecen los municipios rurales, es ruin y vergonzoso”, apuntó.
La legisladora explicó que tras el pronunciamiento que hizo en el Congreso local, acudió personal de la Procuraduría a su oficina para anunciarle que la recibiría un subprocurador, oferta que ella rechazó, pues este empleado carece de poder de decisión.
Indicó que insistirá en pedir más seguridad para el norte del estado, para que no repunten los índices delictivos que ya habían descendido.
“Otra vez han regresado los robos de casa-habitación, principalmente en los municipios de Anáhuac y Sabinas Hidalgo. Ya se habían logrado abatir por policías ministeriales y personal de la Procuraduría en esos municipios, el robo a ganado y a maquinaria y equipo de los ranchos como tractores y sembradoras”.
“Ahora ya hay un repunte. Pedimos que regresen los ministeriales, que rectifique la Procuraduría, no queremos ver el escenario del 2012 cuando los delincuentes tenían el control de los municipios rurales de Nuevo León”, señaló.