Yessica Ayala, Felipe P. Mecinas
E-Consulta
Foto: Yessica Ayala
Atlixco, Pue.- Vigilada las 24 horas por policías estatales, Enedina Rosas Vélez, ex comisariada ejidal de San Felipe Xocanayucan, convalece a los ataques de asma que deterioraron su salud en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Atlixco, donde fue recluida tras su detención el 6 de abril por oponerse a la instalación del Gasoducto Morelos.
Desde hace 15 días, la mujer de 60 años fue trasladada de emergencia al Hospital Municipal San Juan de Dios, ubicado en la calle 11 sur 304, a unas cuadras del palacio municipal de Atlixco, para recibir una atención especializada.
Entrevistada por municipiospuebla.com.mx la ahora activista social afirmó que se encuentra mejor de salud pero con la ilusión de regresar pronto a su casa, pues el encierro de los últimos cinco meses ha sido muy difícil.
«Hay como 15 mujeres, todas estamos encimadas, es muy pequeño el espacio que tenemos, yo extraño el campo y el aire libre, soy al fin campesina», indicó.
El hospital se encuentra en una vieja casona, es un lugar en donde no hay cuartos para los enfermos, solamente hay separaciones de plástico con unas puertas de madera que dividen a un paciente de otro.
Allí el espacio es también muy reducido, más que el que se encuentra en el área de mujeres en el Cereso, únicamente hay una cama individual, una silla, una pequeña mesa y nada más.
En el lugar no hay ventanas, no hay un espacio por donde ella pueda respirar el aire limpio, existe un fuerte olor a alcohol y a desinfectantes; el único contacto posible con el exterior es el pasillo que corre hasta la puerta donde siempre hay un gendarme, así que nunca sale.
Por las mañanas, su hija Lucina Quintero Rosas llega a atenderla y le lleva algún hilo para que cosa una servilleta y así se olvide un poco de la monotonía, pero también algunos primos, o compadres desfilan entre las visitas, no todos a la vez, solamente una persona puede estar en ese lugar por unos breves minutos.
Ya en corto, Enedina Rosas aseguró que no ha sido fácil estar en esta posición pues ha sido «regañada» por los policías y funcionarios del ayuntamiento por las entrevistas que ha otorgado a los medios de comunicación en los últimos días. Incluso, refiere, dieron indicaciones de no dejar pasar a nadie.
Aunque se dijo sabedora de que su defensa legal busca que la justicia le conceda continuar su proceso judicial bajo arraigo domiciliario, refirió que desconoce cuáles son las condiciones en las que su abogado, Mario Vélez, se conducirá.
La jornada previa, su defensa acusó que las autoridades han retrasado el informe sobre la salud de la detenida, y sin este documento les es imposible solicitar el traslado a su domicilio.
En apoyo de la ex presidenta del Comisariado Ejidal, el Movimiento por la Alternativa Social (MAS) iniciará el día 4 de octubre un ayuno en el zócalo de la ciudad de Puebla para exigir su libertad y para que se dicte la inmediata orden de arraigo y el desvanecimiento de los datos en el proceso judicial.
