Claudia Guerrero y Jessika Becerra
Reforma
Cd. de México (13 noviembre 2014).- El Gobernador César Duarte depositó 834 millones de pesos del dinero de los mexicanos en el Banco Progreso Chihuahua, del cual es accionista, reveló el senador panista Javier Corral.
El legislador chihuahuense aseguró que pruebas de esa transacción forman parte de la denuncia interpuesta ante la PGR contra el Mandatario de esa entidad, con la finalidad de que sea investigado por peculado y enriquecimiento ilícito.
«No tiene nombre el haberse hecho banquero siendo Gobernador del Estado y luego destinar fondos públicos para fortalecer a su banco. Es un verdadero escándalo», condenó Corral.
Duarte es uno de los principales socios de esa institución: invirtió 65 millones de pesos de su dinero -a través de un fideicomiso en el que también participa su esposa Bertha Gómez-, con lo cual es dueño del 15 por ciento de acciones.
En la querella que fue presentada desde el 23 de septiembre por el activista Jaime García Chávez, se detallan las instrucciones que el Gobernador dio a su Secretario de Hacienda, Jaime Ramón Herrera -quien a su vez es director y fundador del banco-, para realizar los depósitos, agregó Corral.
Además, denunció, el Gobierno chihuahuense aceptó que el banco entregara rendimientos del 3.95 por ciento, cuando en anuncios espectaculares ofrece a sus clientes una tasa del 6.7 por ciento.
El Banco Progreso Chihuahua confirmó ayer la participación del Gobernador César Duarte en el capital de esta firma financiera.
Sergio Becerra, gerente general del Banco Progreso Chihuahua, explicó que el Mandatario estatal aún no puede ser considerado accionista, ya que el banco no ha empezado a operar formalmente.
Sin embargo, Duarte aportó 65 millones de pesos al fideicomiso que formará al capital del banco y que suma 694.5 millones de pesos.
«Él realmente todavía no es accionista. Él es el aportante a través de un fideicomiso para futuros aumentos de capital del Banco Chihuahua», justificó.
Becerra explicó que aún no está autorizada la operación del Banco Progreso Chihuahua, pero sí lo está su figura y la fusión entre la Sociedad Financiera Popular (Sofipo) Akala, la unión de crédito Progreso y la Casa de Cambio Única para convertirse en banco.
«Legalmente en el fideicomiso, él (Duarte) no tiene ningún título accionario dentro de las tres instituciones y lo tendría hasta una vez iniciado el banco», comentó.
Duarte inició su aportación al fideicomiso a finales de 2011 y fue ampliándola en diferentes momentos.
Según Becerra, el Gobernador ya no tenía previsto ampliarla porque una de las políticas internas del consejo de Progreso es que ningún accionista tenga más del 10 por ciento del capital.
El proyecto del banco contempla 87 accionistas en su mayoría empresarios y grupos familiares de la región centro sur de Chihuahua.
Descartan nómina
Becerra descartó que Progreso haya recibido depósitos para pagar a los trabajadores del Gobierno de Chihuahua.
«Es totalmente falso que tengamos la nómina del Gobierno de Chihuahua. Yo sé lo que estoy diciendo, nunca hemos tenido la nómina de ningún empleado», sostuvo.
Sin embargo, reconoció que la Administración de César Duarte tiene contratado un producto de inversión en una de las empresas de Progresa, cuyo monto no quiso revelar.
Asimismo, la Tesorería del Gobierno de Chihuahua contrató un producto financiero con Progresa mediante el cual invirtió 800 millones de pesos a plazo de 7 días, monto que ya fue retirado.
El gerente general también descartó un conflicto de interés en el banco por tener a un Gobernador como accionista, ya que el negocio está enfocado en personas físicas y en pequeñas y medianas empresas.
«No está en nuestro negocio atender a los gobiernos federal, estatal o municipal», mencionó.
Comentó que las autoridades financieras conocen el origen de los 65 millones de pesos.
«En lo personal y como grupo desconocemos los negocios que (Duarte) pudiera tener, pero los ingresos de todos los participantes del proyecto fueron revisados minuciosamente por el Banco de México, Hacienda y CNBV.
«Ellos revisaron uno a uno, las familias, los grupos para que claramente se viera el origen de los recursos», afirmó.