Roberto Garduño
La Jornada
La crispación originada por el caso Iguala y el escándalo de la llamada Casa Blanca de las Lomas de Chapultepec dio pie al desaseo parlamentario en la Cámara de Diputados, donde legisladores de PRI y Verde propiciaron un intercambio verbal con representantes de PRD, PT y Movimiento Ciudadano (MC), quienes desplegaron una manta en la base de la tribuna con la leyenda: “EPN, ¡Renuncia Ya! Ayotzinapa Vive”.
La inminente discusión de los casos Iguala y Casa Blanca en la tribuna ubicó a los priístas y al PVEM en una situación incómoda, que consiguieron conducir hasta que el presidente de la mesa directiva, Tomás Torres Mercado, levantó la sesión por falta de condiciones para continuar los trabajos en el pleno.
Esas diferencias ocurrieron en medio de la discusión y aprobación de la reforma a los artículos 7, 12 y 14 de la Ley General de Educación, en materia de uso y regulación de tecnologías en el sistema educativo nacional.
Fue Ricardo Mejía Berdeja (MC) quien se refirió al Presidente, sin mencionar su nombre: “Quien hoy acusa de desestabilización quisiera una sociedad muda. Quien hoy acusa desestabilización quisiera una sociedad castrada, una sociedad inmovilizada frente a los abusos del poder, frente a la narcopolítica o frente a la corrupción”.
Entonces tocó el turno a Luisa María Alcalde (MC) quien expuso que su bancada está “en favor de los lineamientos generales para el uso seguro y responsable de las tecnologías de la información y la comunicación en el sistema educativo. En eso estamos a favor, en lo que no estamos a favor es en la complicidad, en la impunidad y en la corrupción que rodea el caso de la Casa Blanca”.
Durante la intervención de Alcalde se prefiguró lo que habría de culminar con la sesión de ayer. Integrantes del bando priísta abuchearon sin tregua a la diputada.
El siguiente punto de la orden del día sería la discusión del dictamen con proyecto de decreto que reforma y adiciona diversas disposiciones de la Ley General de Bibliotecas. Sólo restaba darle trámite a ese tema para entrar de lleno al debate sobre el caso Iguala y la Casa Blanca.
En ese momento, mientras se daba trámite, un grupo de diputados de la oposición –PRD, PT y MC– subieron a la tribuna de la mesa directiva y desplegaron la manta que mandó elaborar Manuel Huerta contra el titular del Ejecutivo federal. Eso desquició a los priístas que desde sus curules exigían se retirara ese mensaje. Los opositores no hicieron caso y subió al micrófono Miguel Ángel Aguayo (PRI) y ex rector de la Universidad de Colima, quien escasamente ha participado en los trabajos parlamentarios.
Con tal escenario, el diputado Aguayo dio muestra de destreza, pues consiguió junto con sus compañeros priístas que se reventara la sesión. Frente a la asamblea solicitó a la presidencia: “Le pido con todo el respeto, como siempre lo he tenido a todos mis compañeros diputados, que por favor retiren la manta para poder hacer la fundamentación del dictamen en cuestión; se los pido por favor, con todo respeto”.
No hubo respuesta de los diputados de oposición y sí de un grupo de priístas encabezados por Isidro Moreno, del estado de México, y Abel Salgado, de Jalisco, ante quienes el coordinador del PVEM, Arturo Escobar, seguía desfigurado y enrojecido, gritando: “¡Asesinos, asesinos!” a los perredistas, petistas y de MC.
La respuesta a sus detractores: “¡Amarren a sus perros, amarren a sus perros!”.
Ese intercambio de tan elevado nivel de discusión se replicó en la secretaria de la mesa Directiva, donde la mexiquense priísta Laura Barrera gritó a las diputadas de oposición: “¡Ya bájense chachas, sirvientas!”
Y con enojo le respondieron, “¡Bájense ustedes faranduleras…!, no tardó la respuesta de Barrera: “¡Pendejas!”, y el rebote de esa ofensa surgió de la potente voz de Socorro Ceseñas: “La pendeja eres tú”.
A este desorden se sumó desde el sector priísta el despliegue de otra manta que acusaba: “AMLO=MAZON=ABARCA=INVESTIGACION”.
El presidente de la cámara Tomás Torres Mercado, quien había conseguido que el clima no se saliera de orden, determinó ante la crispación que no había condiciones para continuar en sesión, la levantó y convocó a una nueva para el martes próximo.
Mientras los legisladores abandonaban el salón de sesiones, Manlio Fabio Beltrones se acercó al coordinador del PRD, Miguel Alonso Raya, y sus correligionarios Roberto López Suárez y Malú Micher, para reclamar el desorden. El priísta dijo que sobre el quehacer de la política no se puede imponer la antipolítica, y los representantes del sol azteca reprocharon el veto contra María Luisa Alcalde, y demandaron que se incluya en la orden del día del martes próximo los temas de controversia.
