Daniela Barragán
Sinembargo
Ciudad de México, 10 de diciembre (SinEmbargo).– Las elecciones locales que se realizarán el próximo año en 17 estados del país se convierten en un factor de riesgo que puede desestabilizar la economía de dichas entidades, advirtió un análisis de la calificadora Moody’s. Explicó que el peligro radica en que en años de comicios, los gobiernos estatales tienden a desacelerar sus gasto, principalmente en obra social.
“Por el lado electoral es siempre un factor de riesgo; el gasto se puede acelerar más y puede haber una desconexión entre ingresos y gastos. Lo que traería calificaciones a la baja”, advirtió Alejandro Olivo Villa, Director Ejecutivo Adjunto de Moody’s.
A pesar de las críticas que este año recibieron entidades como Chihuahua, Coahuila y Nuevo León, por su excesiva deuda pública, “estamos asignando una perspectiva estable, damos el beneficio de la duda de que las finanzas estatales se mantendrán pese a tener un ciclo electoral. Lo fundamentamos en que en el ultimo par de años hemos visto una institucionalización con medidas que buscan contener el gasto de manera estructural. El Gobierno Federal ha tenido una participación más activa en propiciar las medidas de contención del gasto, la Banca, en los créditos que otorgan a los estados”, dijo.
Señaló que en materia de deuda estatal, el próximo año será la prueba. “No estamos esperando incrementos importantes en la deuda, que la tendencia se mantenga. De haber incrementos abruptos en la contratación de deuda, vinculado al proceso electoral, lo veremos reflejado en las calificaciones”.
Entre las entidades en las que se realizarán comicios están Campeche, Colima, Michoacán, Nuevo León, Querétaro y San Luis Potosí, en todas se renovará la gubernatura.
“No hemos visto un esfuerzo claro de mayor recaudación, pero no un esfuerzo generalizado ni con una dirección muy clara. En ese sentido es cierto que el proceso electoral podría distraer la atención de medidas de mayor ingreso y de contención del gasto. Aún tenemos razones para mantener una perspectiva estable para 2015″, explicó.
En el estudio Perspectiva 2015-Estados Mexicanos, Moody’s prevé que 2015 será un año con opciones de crecimiento para las 23 entidades que evaluó.
Se estima que por bajos déficits y por el crecimiento moderado de la deuda, la perspectiva es estable, ya que de 2010 a 2013 el crecimiento anual de la deuda llegó a 22 por ciento. Para 2015 se estima que sea de 8 por ciento.
Alejandro Olivo Villa explicó que aunque la actividad económica tenga un crecimiento, es normal que en época electoral se observe una aceleración del gasto público, “se dará el beneficio de la duda a los Estados que tendrán comicios, tanto a nivel estatal como municipal. Desde 2013, observamos que previo a las elecciones se aplican medidas que buscan contener el gasto (…) en caso de que no se registren esas acciones, no se dudará en modificar la perspectiva”.
Añadió que de ver incrementos abruptos en la contratación de deuda vinculados al proceso electoral, será necesaria una reevaluación, “el riesgo está, pero no hemos registrado incrementos importantes en la deuda y esperamos que los que se dieron en 2013 y 2014 se mantengan.
Para Moody´s, otros de los factores negativos para 2015 son el incremento sustancial de los ingresos frente al gasto, un regreso rápido al incremento en los niveles de deuda y un deterioro de la liquidez por un uso frecuente de la deuda de corto plazo.
El escenario positivo recae nuevamente en la puesta en marcha de las reformas estructurales, lo que fortalecerá la cultura crediticia, el manejo financiero y la transparencia.
LAS CALIFICACIONES DE LOS ESTADOS
Personal de Moody´s aseguró que a pesar de una lentitud en las transferencias federales, la caída en el precio del petróleo, que en año acumuló 44 por ciento, el trabajo en el control de gastos y el índice de crecimiento del presupuesto, el país tiene un panorama estable para 2015 y 2016, en el que se prevé un crecimiento de 2 a 3 por ciento.
Sin embargo, este índice que envuelve a los siguientes dos años, refleja que a pesar de la aplicación del paquete de Reformas, en especial la Reforma Energética y la de Telecomunicaciones y Radiodifusión, no habrá un cambio significativo en la economía.
Según el estudio, 39 por ciento de los Estados calificados refinanciaron su deuda y la mayoría de éstos, son de grado especulativo y sólo cinco tienen Grado de Inversión: Guanajuato, Querétaro, Puebla, Tlaxcala y Baja California.
Los Estados con las calificaciones crediticias más bajas son Morelos, que registró un deterioro rápido en sus finanzas públicas; Zacatecas, que en 2010 tuvo un incumplimiento en el pago de un préstamo; Veracruz que tuvo niveles más altos de endeudamiento, y Nayarit, que registró una tasa de crecimiento de la deuda.
En el ámbito municipal, se detectaron niveles bajos de calificaciones por falta de liquidez y bajos niveles de ingresos propios.
A junio pasado, la deuda de estados y municipios llegó a un saldo máximo de 489 mil 643.4 millones de pesos, del cual el Distrito Federal, Nuevo León, Chihuahua, Veracruz y estado de México concentran casi 50 por ciento.
Las obligaciones financieras de estados y municipios representó 3.0 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) estatal, porcentaje ligeramente menor al de 3.1 por ciento en diciembre de 2013, pero superior al de 2.8 por ciento en junio de año pasado.