AP y Reuters
La Jornada
La Habana. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, habló el martes por teléfono con el primer ministro belga, Charles Michel, para ofrecer sus condolencias y apoyo después de los ataques en Bruselas que provocaron la muerte de al menos 34 personas, dijo el martes la Casa Blanca.
«Haré todo lo necesario» para ayudar a llevar a los atacantes de Bruselas a justicia, prometió Obama.
El mandatario, de visita oficial a Cuba, dijo que el pueblo estadunidense se encuentra «en solidaridad» con Bélgica y condena «estos desquiciados ataques contra gente inocente».
Añadió que «el mundo debe unirse» contra «la plaga del terrorismo». [¿O sea que Obama pide al mundo unirse contra Estados Unidos? Porque el terrorismo proviene de ellos y sus aliados en todo el mundo. Son ellos los causantes y promotores de conlifctos, sobre todo en Medio Oriente. Lo que en realidad está avisando Obama, es que la matanza de civiles en la región seguirá sin tregua.]
Horas antes se informó que Obama fue informado en la madrugada del martes de los ataques.
La Casa Blanca dijo que las autoridades estadunidenses estaban en contacto con funcionarios belgas tras las explosiones registradas en el aeropuerto y en el metro de la capital del país.
Al menos uno de los ataques podría haber sido obra de un suicida y, tras los incidentes, Bélgica elevó su alerta de seguridad al nivel más alto.
El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos seguía de cerca el desarrollo de los acontecimientos en Bruselas, dijeron funcionarios el martes. La agencia dijo que «no dudará en ajustar nuestras medidas de seguridad, si procede, para proteger al pueblo estadunidense».
Seguridad Nacional insistió en que la población debe reportar cualquier actividad sospechosa en sus comunidades a las autoridades.
La secretaria de Justicia, Loretta Lynch, también fue informada sobre los ataques, dijeron funcionarios en Washington. El departamento y el FBI estaban en contacto con otras agencias del gobierno estadunidense y con sus contrapartes belgas.
En Bruselas, la embajada de Estados Unidos recomendó refugiarse en algún lugar y dijo a los ciudadanos estadounidenses que sigan las noticias sobre lo sucedido y tomen «las medidas adecuadas para reforzar su seguridad personal».
La semana pasada, el secretario de Seguridad Nacional Jeh Johnson dijo que su departamento evalúa constantemente la necesidad de elevar las medidas de seguridad o emitir un boletín a través del Sistema Nacional de Asesoramiento sobre Terrorismo.
En diciembre, un boletín avisó al público que la policía temía que hubiera extremistas violentos e individuos inspirados por el terrorismo en el propio país.