México, 21 de febrero 2019 (NOTIGODÍNEZ).- Como si un gigantesco y violento volcán de inmundicia acumulada por décadas hubiese finalmente hecho erupción, las «irregularidades» en la gestión de Rosario Robles Berlanga al frente de la Secretaría de Desarollo Social (Sedesol) y de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) siguen saliendo a borbotones.
La Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó nuevos gastos «irregulares» por al menos 2 MIL 377 MILLONES DE PESOS en la Sedatu de Robles, adicionales a los desvíos de 340 MILLONES 983 MIL PESOS previamente denunciados en la investigación de La Estafa Maestra.
De acuerdo con la Agencia Proceso (Apro), la ASF detalló en dos informes que Sedatu gastó MIL 173 MILLONES DE PESOS del Programa de Infraestructura a través de 26 delegaciones, “sin que fueran debidamente registrados ante la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, como pasivo circulante (ADEFAS), por lo que no se puede conocer el destino que se le dio a dichos recursos”.
De ese monto, la delegación de Sedatu en el Estado de México gastó 142 MILLONES 304 MIL pesos sin rendir cuentas, ¡casualidad!, en 2017, año en que se realizaron las «elecciones» fraudulentas para imponer al priista Alfredo del Mazo Maza, primo del asesino de Atenco y entonces usurpador de la Presidencia, Enrique Peña Nieto.
Asimismo, la Sedatu entregó ese mismo año 596 MILLONES DE PESOS a “diversos proveedores” con recursos federales de la partida “Subsidios a la producción del Programa de Infraestructura”, sin justificarlos.
Pagó también 602 MILLONES DE PESOS a 14 proveedores, entre empresas diversas, organizaciones de la sociedad civil e incluso la constructora del Fondo Nacional de Turismo (Fonatur), sin transparentar un solo peso. Ante el mar gigantesco de irregularidades en la documentación de ese gasto, la ASF dio por perdidos los 602 millones.
¡Y aún hay más! Sedatu despilfarró 81 MILLONES DE PESOS en baratijas, a saber: 40 millones de pesos para comprar 110 mil kits que incluían un chaleco, una mochila, un sombrero y un impermeable; otros 41 millones de pesos para comprar 321 mil llaveros, 205 mil vasos cilíndricos y 321 mil “morrales ecológicos”. La empresa favorecida, Corporación Mexicana de Impresión, S.A. de C.V. (Comisa), no tenía experiencia alguna en ese ramo, por lo que subcontrató a otras cuatro empresas… fantasma.
“Existe una recurrencia por parte de Sedatu en utilizar recursos presupuestales asignados a programas que se encuentran sujetos a reglas de operación, para destinarlos a capítulos y conceptos de gasto en fines distintos a los que estaban presupuestados”, concluyó la auditoría.
Opinión:
Esto es sólo una milésima parte de la cloaca monstruosa que fue el espuriato de Peña. Nos podríamos pasar la vida entera denunciando más y más atracos, pero… ¿qué vamos a hacer al respecto? ¿Vamos a dejar impune a Peña, sus esbirros y jefes empresarios que acaparan la mayor parte del millonario botín? Estas preguntas van dirigidas especialmente a los seguidores de AMLO, que le aplauden todo sin un mínimo de dignidad para cuestionar su inacción ante las evidencias descaradas de corrupción y saqueo de sus criminales antecesores. Entiendan: la obligación de AMLO es proceder como por ley corresponde, en vez de andar otorgando «perdones», consultando al pueblo, mirando hacia otro lado («adelante», dirá él) o ridiculeces similares. ¿POR QUÉ PERMITEN QUE SU LÍDER LES TOME EL PELO DE ESTE MODO? Es obvio, pues, que si queremos justicia y recuperar lo robado, DEBEMOS REACCIONAR PARA MATERIALIZARLA POR NOSOTROS MISMOS, ya que nadie más lo hará.
Con información de Proceso
