Enrique Méndez
La Jornada (Foto: María Luisa Severiano)
México, DF. Las comisiones unidas de Radio y Televisión y Comunicaciones de la Cámara de Diputados aprobaron esta noche el dictamen en lo general de la minuta del Senado con la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión y la ley del Sistema Público de Radiodifusión, y por un acuerdo de la mayoría del PRI, PAN, PVEM y Panal, las reservas se presentarán en la sesión extraordinaria de este martes.
Después de seis horas de debate, diecisiete integrantes de la comisión de Comunicaciones aprobaron el dictamen con cinco votos en contra; mientras que de la Comisión de Radio y Televisión siete votaron a favor, siete en contra y se registró la abstención de la diputada del PAN Patricia Lugo Barriga.
Las comisiones informaron que hasta el momento existen 193 reservas y el PAN dijo que presentará las suyas durante el transcurso de la sesión.
No obstante, existe la decisión de PRI, PVEM y Panal de no realizar modificaciones al dictamen para que la minuta no tenga que ser devuelta a la Cámara de Senadores, que se encuentra en el receso de su propio periodo extraordinario de sesiones.
El vicecoordinador del PRD y secretario de la Comisión de Comunicaciones, Miguel Alonso Raya, resaltó que la redacción de la minuta mantiene la definición de agente económico preponderante con base en la participación de éste, por sector y no por servicios.
Ésto, agregó, sólo busca beneficiar a un grupo televisivo. “Se distorsiona la Constitución para favorecer con dedicatoria a una empresa concentradora y monopólica como Televisa. En cambio se castiga a las radiodifusoras comunitarias e indígenas, a las que se mantiene en la pobreza permanente”, indicó.
Antes, ambas comisiones rechazaron dar entrada a una solicitud de la diputada Roxana Luna Porquillo (PRD) para que se excusaran de participar en el debate los diputados del PRI, Enrique Cárdenas, Patricio Flores, Jorge Mendoza y Simón Valanci; los del PVEM Federico González Luna y Ana Lilia Garza, y el diputado del PAN Homero Niño, por un probable conflicto de intereses, al ser considerados como integrantes de la telebancada.