Jesús Castro
Vanguardia
Piedras Negras, Coahuila.- Tras darse a conocer la próxima apertura del campo de golf “Black Bear” en Piedras Negras, que gastará hasta 500 mil litros de agua para riego y lagos artificiales, Ignacio Diego Muñoz, exfuncionario estatal y uno de los principales promotores del proyecto, no respondió a la alerta lanzada por ambientalistas.
El problema de dicho gasto de agua es que, según la organización ambientalista “Amigos del río San Rodrigo”, ese derroche pone en riesgo el acuífero en el norte de Coahuila, pues debería ser aprovechado en la agricultura y el consumo humano, y ahora está siendo sobre explotado por la industria, y próximamente en el fracking.
Por ello, VANGUARDIA buscó ayer a Ignacio Diego Muñoz, actual titular del Fideicomiso de Riesgo Compartido (Firco), donde tomaron datos para, dijeron, tener en cuenta la entrevista solicitada, aunque aclararon que el funcionario no es socio mayoritario de ese negocio.
Según se publicó el año pasado en distintos medios de comunicación, José Musa de León compró el 60 por ciento de las acciones del “Black Bear”, convirtiéndose en el socio mayoritario del complejo.
Se ha señalado que Ignacio Diego, aprovechó información privilegiada cuando era Secretario de Planeación y Desarrollo en el sexenio de Enrique Martínez, sobre nuevas inversiones en la Frontera, comprando terrenos a bajo costo, que después aumentarían su plusvalía.
Ayer también se buscó a Hugo Martínez, delegado de Conagua en Coahuila, para conocer la situación que guarda el acuífero Allende-Piedras Negras.
Su oficina de Comunicación informó que el Delegado se encuentra fuera de la ciudad y que posiblemente volvería hasta la próxima semana, pero que en caso de que otro funcionario pudiera otorgar la entrevista, lo informarían en los siguientes días.