Noé Zavaleta
Proceso
XALAPA, Ver. (apro).- A propuesta del gobernador Javier Duarte de Ochoa, el Congreso local tomó protesta a Beatriz Rivera Hernández como nueva magistrada del Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJ).
Rivera Hernández ocupará el lugar que dejó vacante tras su muerte el magistrado Benjamín Garcimarrero Ochoa.
Jueza de los distritos judiciales de Coatepec, Xalapa y Veracruz, entre otros, la trayectoria de Beatriz Rivera en el Poder Judicial se vio empañada en el 2012, cuando llevó el expediente del homicidio de la corresponsal de Proceso en esta entidad, Regina Martínez Pérez, asesinada el 27 de abril en el interior de su domicilio.
Rivera fue la que sentenció a 38 años y dos meses de prisión a Jorge Antonio Hernández El Silva, uno de los dos presuntos asesinos de Regina Martínez que recuperó la libertad gracias a una falla de procedimiento que luego se corrigió, pero antes de ser reaprehendido huyó. Actualmente es prófugo de la justicia.
En su resolución, la ahora magistrada pasó por alto las irregularidades en que incurrió el Ministerio Público y la Fiscalía de Veracruz, como la de detener a El Silva sin orden de aprehensión y, peor aún, la de torturarlo para que se declarara culpable, según determinó la Séptima Sala Penal del Poder Judicial del Estado (PJE).
El vicepresidente del Congreso, el panista Domingo Bahena, aseguró en la exposición de motivos legislativos que Beatriz Rivera cuenta con todos los requisitos constitucionales y legales para el cargo.
Rivera fue ungida con 45 votos a favor de los legisladores del PRI, PAN, PRD, PVEM, Alternativa Veracruzana y Nueva Alianza; el voto en contra provino del petista Fidel Robles Guadarrama.
La presidenta de la Mesa Directiva, la priista Ana Guadalupe Ingram, confirmó que la propuesta de Beatriz Rivera como nueva magistrada del Poder Judicial es un “premio” que el gobernador Javier Duarte otorga a Rivera –dijo– por su “impecable trayectoria”.
“Yo los invito a que den una leída al currículo de la magistrada, que tiene una impecable carrera. Es una mujer con toda la calidad moral y profesional y experiencia judicial en la carrera. Sí es un premio, pero a su esfuerzo, carrera e impecable trayectoria”.
En entrevista con reporteros, la exjueza negó que su designación como magistrada sea un premio del gobernador Duarte por resolver el asesinato de la periodista Regina Martínez.
“(La toma de protesta) es una culminación a una carrera judicial de 27 años. Premio en latín quiere decir lo que se toma primero (sic) y yo llego a la magistratura tras 30 años de servicios, creo que no es poco… la sentencia a El Silva se hizo bajo el marco de la legalidad”, reviró Rivera.
El caso de la ahora magistrada no es el único. Otros implicados en el caso de la corresponsal de Proceso también fueron premiados por Duarte.
Marco Antonio Lezama Moo, exsubprocurador de Justicia, fue nombrado el pasado 30 de junio como magistrado del TSJ, pese a los desaseos e irregularidades en las que desahogó la averiguación previa relativa al asesinato.