Mónica Camacho
La Jornada
La caída del PIB estatal a 0.1 por ciento en 2013 no solo es consecuencia de la situación económica nacional, sino también de una política pública local que se encuentra orientada a apuntalar la imagen política del gobernador Rafael Moreno Valle y no a incrementar la productividad, criticó el investigador de la Facultad de Economía de la UAP Eudoxio Morales Flores, quien vaticinó que las complicaciones económicas continuarán en Puebla por lo menos tres años más.
A su vez, Germán Sánchez Daza, quien también es académico en la máxima casa de estudios del estado, aseguró que la administración estatal ha errado al apostar la mayor parte de la inversión pública en el impulso del sector automotriz, el turismo y la construcción, ya que éstos no son suficientes para poder garantizar el crecimiento económico, empleos ni mejores salarios.
Eudoxio Morales y Germán Sánchez abordaron el tema en entrevistas que concedieron por separado a La Jornada de Oriente, luego de que reportes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y del Banco Nacional de México (Banamex) confirmaron un desplome en la producción económica de Puebla.
El PIB de 0.1 por ciento del año pasado contrastó con el registrado en el periodo posterior a las crisis de 2009, durante el cual rondó entre 6.5 por ciento y 7.7 por ciento, colocando al estado en los primeros lugares de crecimiento económico entre las 32 entidades federativas del país.
Eudoxio Morales, quien es doctor en Finanzas Públicas, afirmó que la estrategia económica del gobierno del estado se encuentra mal planteada y solamente responde a la “ocurrencia”, debido a que la mayoría de las acciones que se han llevado a cabo no se fundamentan en el Plan Estatal de Desarrollo ni impactan en la base productiva.
En esa situación se encuentran, prosiguió el especialista, las obras de remodelación que se realizan en el Parque Ecológico Revolución Mexicana por 100 millones de pesos, así como la instalación del teleférico y una rueda de la fortuna.
“Los recursos que se han destinado a esas acciones no se registran dentro del gasto de inversión, sino en el gasto corriente porque no van orientados a incrementar la producción de las empresas; solamente tenemos obras adornando la ciudad”, lamentó.
Además, señaló que “históricamente las actividades terciarias no generan producción ni crecimiento sostenido en mediano o largo plazo”, por lo que a su parecer los fondos públicos que se destina a ese rubro resultan infructuosos, y más si se toma en cuenta que Puebla no es un polo turístico por naturaleza.
Ante ese panorama, concluyó que la estrategia económica del estado no tiene el objetivo de consolidar a Puebla como un estado turístico, sino el de “apuntalar a Rafael Moreno Valle en términos políticos”.
Al respecto, mencionó: “Estas obras son de relumbrón, ubican a Rafael Moreno Valle como candidato fuerte pese a lo que ha pasado en el contexto nacional, pero a los poblanos en poco nos benefician”.
Para el investigador, que también cuenta con un doctorado en Ciencias Políticas y Administración Pública y una maestría en Planeación Urbana y Regional, el gobierno de estado debió continuar la senda que abrió al lograr la instalación de la planta armadora Audi, atrayendo más inversiones, pero no lo hizo.
El estado de la pobreza
Germán Sánchez Daza aseveró que el mayor problema del estado es que no cuenta con una política pública que permita un mayor tejido entre los distintos sectores productivos, por lo que Puebla sigue caracterizándose “por tener mucha pobreza, bajos salarios y empleo precario”.
Alertó que la falta de crecimiento económico que se ha registrado en los dos últimos trimestres de 2013 y el primero de 2014 agravará la situación porque tendrá un impacto directo en el empleo y en el ingreso per cápita, lo cual podría traducirse en un nuevo incremento de la pobreza.
El académico, que actualmente participa en proyectos de investigación sobre el desempeño económico de Puebla en el patrón de producción global, consideró indispensable que el gobierno cambie su política a una que priorice el beneficio social y fortalezca el tejido social productivo.
“En la medida en que solamente se prioricen sectores exportadores, como la industria automotriz y la minería o sectores muy concretos como el turismo, aun cuando se invierta en construcción, los esfuerzos se verán anulados”, advirtió.
Sobre la participación de Audi en la economía poblana, indicó que es posible que tenga un impacto importante a largo plazo, pero el problema es que nuevamente se focaliza la producción de Puebla en un solo sector que depende de la inversión extranjera y no de las políticas regionales.
“Lo que pase en la empresa Audi lo define Audi; lo que pase con las proveedoras lo definirá Audi; no lo definirá el gobernador ni el presidente del país, y eso no es favorable para la economía local”, enfatizó.