Jesús Aranda
La Jornada
El titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), general Salvador Cienfuegos Zepeda, aseveró que las acciones de protesta realizadas frente a los cuarteles militares por padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos son “provocaciones” y las tropas “han actuado con prudencia y tolerancia, evitando la confrontación directa”. El único hecho violento ocurrió el 12 de enero pasado en las instalaciones del 27 batallón de infantería, con sede en Iguala, Guerrero.
Sin embargo, el general aclaró: “esto no quiere decir que no se cuente con la capacidad de respuesta para contenerlos”.
Cienfuegos declaró lo anterior en entrevista con la revista Foro Jurídico, en la que agregó que la atención de “estos problemas requiere de la participación de autoridades civiles competentes, con base en las denuncias que hemos presentado.
“Es deseable para nosotros que las autoridades ministeriales correspondientes, del fuero común y del fuero federal, cumplan con la ley y con lo que la Carta Magna establece”, subrayó el divisionario en la publicación, dirigida a licenciados en derecho y barras de abogados, correspondiente a marzo.
Por otra parte, en respuesta a una solicitud de información, la Sedena señaló que del 17 de diciembre al 16 de enero pasado se registraron manifestaciones en demanda de la aparición de los estudiantes de Ayotzinapa frente a 28 instalaciones castrenses y en cinco de ellas (incluido el Campo Militar número uno) los quejosos entregaron un documento en el que solicitan ingresar a los cuarteles.
La dependencia agregó que como resultado de los hechos violentos ocurridos afuera del batallón de Iguala, las instalaciones castrenses sufrieron daños en la puerta de acceso, los cristales de la guardia de prevención y en dos garitones, por un monto de 12 mil 100 pesos.
“En las demás instalaciones militares no se presentaron incidentes mayores, únicamente (los manifestantes) realizaron pintas alusivas a sus demandas.”
La Sedena sostuvo que “no existe directiva que impida” que personal civil entre a las instalaciones militares, “siendo de manera ordinaria dicho ingreso por los diversos trámites que pueden realizarse en las mismas por parte de civiles, debiendo identificarse plenamente, exponer los motivos de su visita y que la realicen de manera pacífica”.
Acerca del destino de las peticiones de los padres de los normalistas desaparecidos, la dependencia no hizo comentarios.
La Sedena, agrega la información, ha recibido cinco solicitudes para permitir el ingreso a los padres de los jóvenes u organizaciones afines para que busquen a normalistas desaparecidos en el Campo Militar número uno, en el Distrito Federal, así como en Orizaba, Veracruz, y Morelia, Zamora, Lázaro Cárdenas y Zitácuaro, en Michoacán.
Las manifestaciones para exigir la presentación de los jóvenes estudiantes se realizaron en los cuarteles ubicados en el Campo Militar número uno y en la delegación Tlalpan, en el Distrito Federal, así como en las ciudades de Cuernavaca, Morelos; Tijuana, Baja California; San Luis Potosí, SLP; Orizaba y El Lencero, Veracruz; San Cristóbal de las Casas, Chiapas; Huajuapan de León y San Juan Bautista La Raya, Ixtepec e Ixcotel, Oaxaca; Ayutla de los Libres, Cruz Grande, Chilpancingo, Iguala y Petatlán, Guerrero, además de Mérida, Yucatán.