México, 8 de diciembre 2015 (NOTIGODÍNEZ).- La ofensiva priista desde los tres niveles de desgobierno espurio para despojar del agua potable a los habitantes de Coyotepec, en el Estado de México, sigue avanzando con las prácticas violentas que siempre han caracterizado al grupo criminal llamado «Partido Revolucionario Institucional».
El pasado jueves 3 de diciembre, golpeadores priistas volvieron a atacar a vecinos que controlan la Administración de Agua Potable de Coyotepec, misma que se opone a la municipalización del servicio.
En estos nuevos hechos de violencia, se registraron varias personas lesionadas, entre ellas el ciudadano Tomás Mezas, beneficiario del Mecanismo Federal de Protección a personas defensoras de los derechos humanos, y Viridiana Moreno, quien documenta las acciones de resistencia del pueblo en defensa del agua potable, según informó el portal digital Impacto.mx.
Una fuente al interior del municipio informó que durante el ataque, los priistas golpearon también a mujeres, niños y personas de la tercera edad. «Esto cada día está peor», dijo la fuente al profesor Alfredo Sánchez Rodarte, quien hizo llegar el testimonio a este medio alternativo.
El denunciante señala que la situación es insostenible porque las bombas de agua que suministran el vital líquido desde los pozos comunitarios, llevan ya mucho tiempo sin energía eléctrica por consigna de los desgobiernos local, estatal y federal, como parte del hostigamiento para que los pobladores desistan de mantener el control de los pozos.
En consecuencia, por lo menos tres escuelas municipales han tenido que cerrar debido a la falta de agua. En la imagen de cabecera de esta nota, proporcionada por la fuente al profesor Sánchez, se muestra la escuela primaria Luz Casas Cruz, una de las que suspendieron labores.
Por si fuera poco, el ciudadano denunció que el desgobierno priista hace negocio con el suministro de agua a través de pipas, cobrando de 100 a 130 pesos por una carga de agua.
A finales de octubre pasado, los habitantes denunciaron que, en efecto, se fraguaban nuevos ataques contra su movimiento de resistencia contra la municipalización del servicio de agua potable en Coyotepec.
Actualmente, los administradores del servicio son electos por los propios habitantes en asambleas vecinales, como se viene realizando desde la época prehispánica. La municipalización del servicio implica entregar el control de los pozos al «gobierno» priista, con lo que, a decir de los pobladores, los tres niveles de desgobierno harán negocio para entregarla a grandes empresas.
