México, 21 de septiembre 2018 (NOTIGODÍNEZ).- Andrés Manuel López Obrador, presidente electo de la República, responsabilizó al panista Felipe de Jesús Calderón Hinojosa, exusurpador de la Presidencia en el sexenio 2000-2006, por la situación de violencia que se vive en el país y que trajo consecuencias bárbaras como la aparición de 300 cadáveres en dos tráilers hallados recientemente en Guadalajara, capital de Jalisco, a falta de morgues para almacenarlos.
Esta semana, medios revelaron la existencia de un tráiler que deambulaba por la zona metropolitana de la capital tapatía. Vecinos se percataron del vehículo debido al olor que despedía y, principalmente, a los hilos de sangre que escurrían a los costados del contenedor.
Tras revelarse el macabro hallazgo en medios, el «gobernador» priista Aristóteles Sandoval cesó a Luis Octavio Cotero, encargado del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF), a quien responsabilizó por el mal manejo de los cuerpos. Luego se supo que había un segundo camión también repleto de cadáveres a falta de espacio en la morgue metropolitana. El escándalo orilló a Sandoval a despedir también a Raúl Sánchez Jiménez, ex fiscal general del estado.
Al respecto, López Obrador se quitó finalmente los pelos de la lengua que le «crecieron» durante las campañas, señalando directamente al genocida Felipe Calderón y demás impulsores del fraude de 2006, por la violencia rampante que ha causado un baño de sangre sin precedentes en la historia nacional.
«Los muertos que ponen en dos tráilers es producto del fraude electoral de 2006, porque se desató la violencia. No ganaron la elección en 2006, impusieron al presidente y él, para legitimarse, le declaró la guerra al narcotráfico y le pegó un garrotazo a lo tonto al avispero. Y desde entonces hay mucha violencia en México.
«Pero fue el origen el fraude electoral, no hay que olvidarlo. No estaría así el país y entonces hay que refrescar la memoria a veces», declaró citado por El Universal.
El tabasqueño abundó que, además de la violencia, el país atraviesa una grave decadencia en otros sectores que afectan el bienestar de la sociedad.
«No sólo es un problema económico sino social, moral, de inseguridad, de violencia todo lo que padecemos. Y no me estoy justificando, esto va a cambiar. Ha sido un rotundo fracaso la política que se ha venido imponiendo desde hace 30 años», reiteró.
Opinión:
Este es el AMLO que recordamos con respeto: el que no se anda con simulaciones y habla con claridad, haciendo a un lado los eufemismos, señalando con nombre y apellido a los reponsables de la barbarie. En efecto, coincidimos plenamente con sus declaraciones. Ojalá que ese AMLO vuelva para siempre ahora que está a días de ascender al poder, y no sólo durante instantes efímeros de inspiración. Pero más importante aún, ojalá pase de las palabras a los hechos, cumpliendo la eterna promesa de cambio y, desde las instituciones que al fin encabezará, materializando la anhelada justicia que demanda urgenemente la nación y el pueblo de México.
Con información de El Universal