México, 14 de mayo 2018 (NOTIGODÍNEZ).- Nestora Salgado García, ex comandante de las policías comunitarias de Olinalá, Guerrero, denunció que ha recibido al menos cuatro amenazas de muerte vía telefónica desde que aceptó la candidatura al Senado por el partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
En conferencia de prensa en el Centro Nacional de Comunicación Social (Cencos), ubicado en la Ciudad de México, Salgado denunció que en las llamadas se le advierte que será decapitada cuando regrese a Guerrero. Por ello, informó que ha solicitado formalmente protección a la Secretaría de Gobernación del régimen usurpador de Enrique Peña Nieto, a través del Instituto Nacional Electoral (INE).
“A partir de que acepté la candidatura, empecé a recibir hasta la fecha cuatro llamadas a mi teléfono que utilizo. Ha sido público porque me comunico con diversas organizaciones y ahí han llamado donde me dicen que están esperando mi llegada a Guerrero para cortarme la cabeza, insultándome. Veo que el hecho de ser mujer también implica mucho, o es parte de las amenazas, quererme atemorizar, y sigo firme, y conmigo no funciona eso”, sentenció la ex policía comunitaria.
Salgado recordó que este sexenio estuvo presa injustamente durante tres años, acusada falsamente de secuestro y homicidio, y que por primera vez en mucho tiempo volverá a su natal Olinalá, en el sangriento estado de Guerrero, para reunirse con su familia, amigos y ex compañeros de la policía comunitaria.
“Regreso a casa después de cinco años, después de que me robaron mi libertad, después de que me han arrancado todo, tomo la decisión de regresar, abrazar a mi familia, a mis amigos, a mis compañeros; de llegar al corazón de la montaña de Guerrero, a visitar a los de abajo, a aquellos que han sido ignorados», comentó.
En tal sentido, hizo un llamado al régimen usurpador de Peña Nieto a que «garantice el libre tránsito» porque «no es posible que tengamos que estar pidiendo permiso al estado para poder transitar en nuestro país. No es posible que tengamos miedo caminar en nuestro propio territorio».
Por cuanto al tema de las amenazas, Nestora responsabilizó a José Antonio Meade Kuribreña, candidato del grupo que actualmente usurpa la Presidencia, de «ponerla en riesgo» tras las declaraciones que el sujeto ha realizado en medios y redes sociales, calificando a la activista como «secuestradora y asesina».
“Ahora un candidato a la Presidencia de la República me está exponiendo aún más en televisión diciendo que soy una secuestradora y una homicida, como es el señor Meade, que me está poniendo en peligro, sin ningún sustento, porque hasta esta fecha no hubo ningún sustento.
“Lo que está haciendo el señor Meade, me está poniendo otra vez, y además revictimizando. Eso no se vale, yo ya fui juzgada por un juez. No puede venir a decir a México y a nivel internacional que yo soy una homicida”, sentenció.
Apenas el pasado 10 de abril, Meade criticó la adhesión a Morena de Salgado y del dirigente sindical Napoleón Gómez Urrutia, acusado de desviar recursos millonarios del gremio minero, sugiriendo que son «narcos y delincuentes»:
Comparar a Napoléon Gómez Urrutia con Nelson Mandela, y a Nestora Salgado con Juárez y Madero es no tener idea ni dimensión de la historia. Es una burla. #YoMero les digo que con narcos y delincuentes, nada de mano amiga. Pura mano firme.
— José Antonio Meade?? (@JoseAMeadeK) April 10, 2018
Opinión NOTIGODÍNEZ:
Carajo con la maldita simulación, los bandazos y el arribismo político. La otrora digna Nestora Salgado combatió valientemente al crimen organizado y justamente por ello fue perseguida por el régimen usurpador de Peña Nieto. Ella fue otra más de las víctimas de la feroz consigna peñista por impedir que el pueblo entienda la necesidad de reaccionar y defenderse a sí mismo. Ella sabe perfectamente que así fue. Es realmente lamentable que, inserta ahora en el corrupto sistema político que la criminalizó, Nestora legitime al régimen y «pida garantías de seguridad y protección» a quienes la persiguieron, vejaron y encarcelaron injustamente. Lamentable y delirante… pero perfectamente explicable: un escaño en el Senado representa recursos millonarios para el partido que la postula y, desde luego, una dieta mensual nada despreciable para ella. ¿En serio, Nestora? ¡QUÉ DECEPCIÓN!
Con información de Reforma