Oswaldo Salazar
La Jornada
CUERNAVACA. Mediante una maniobra política que consiguió que diputados de todas las bancadas abandonaran el Pleno Legislativo, el Congreso del Estado vio frustrada su intención de aprobar ayer la creación de la pensión alimentaria para adultos mayores, obligando al Gobierno de la Nueva Visión a programar poco más de 20 millones de pesos en el presupuesto estatal del próximo.
De haber aprobado su creación, el Poder Legislativo habría concretado el tercer golpe político consecutivo al gobierno de la Nueva Visión, luego de la auditoria especial que instruyó al ejercicio del crédito de los 2 mil 806 millones de pesos y de la reforma al decreto de autorización del mismo empréstito, para que entregue al Congreso los 500 millones etiquetados dentro de ese recurso, para la construcción de su nueva sede.
Y es que es pública -aunque no oficial- la versión que han divulgado tanto diputados del grupo parlamentario del PRD como de todas las fuerzas políticas, que reconocen que la iniciativa de pensión para los viejitos no cuenta con el aval del titular del Poder Ejecutivo, que por lo menos en tres ocasiones ha operado políticamente para impedir su creación, al oponerse a destinar los recursos millonarios necesarios para entregar a partir de 2015, los 535 pesos mensuales a mas de 3 mil 213 personas de entre 60 y 65 años de edad, que no cuenten ya con una pensión y que además vivan en alguna de las zonas de atención prioritaria de la entidad.
Al inicio de la sesión los diputados Héctor Salazar Porcayo (PT), Juan Ángel Flores Bustamante (PRD) y Javier Bolaños Aguilar (PAN), que por separado presentaron desde noviembre de 2012 sendas iniciativas para instituir la pensión alimentaria a través de una reforma a la Ley de Desarrollo, Protección e Integración de las Personas Adultas Mayores, reconocieron que finalmente habían reunido el consenso de las distintas fuerzas políticas para sacarlo adelante.
Incluso el presidente de la Comisión de Desarrollo Agropecuario, Joaquín Carpintero Salazar, que -por cierto- movilizó por cuarta ocasión consecutiva a alrededor de 500 adultos mayores con la intención de capitalizar de manera política el logro de la pensión, solicitó y recibió el respaldo del Pleno del Congreso para incluir el tema en el orden del día de la sesión y que este fuera discutido y votado con carácter “de urgente y obvia resolución” para desahogarse ayer mismo.
Sin embargo a la hora de la hora, los diputados se hicieron humo y desaparecieron de la plenaria, obligando -primero- a que el tema se fuera aplazando hasta el final de la sesión y -después- a que ya no fuera discutido, debido a que en el Salón de Plenos no se encontraron presentes los 20 legisladores necesarios para instruir su votación.
Solo permanecieron los perredistas Juan Ángel Flores Bustamante, Lucía Meza Guzmán, Arturo Flores Solorio, Raúl Tadeo Nava y Joaquín Carpintero Salazar; los priistas José Manuel Agüero Tovar, Antonio Rodríguez Rodríguez y Matías Nazario; así como Mario Arizmendi Santaolaya, del PAN; Erika Hernández Gordillo, de Nueva Alianza, y Gilberto Villegas Villalobos del Verde Ecologista.