- Piden a Conagua y Semarnat revisar si es legal la presa del mandatario estatal
- Señalan que tras la construcción del embalse vecinos de Bacanuchi sufren desabasto de agua
Alma Muñoz y Enrique Méndez
La Jornada
El Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la Cámara de Diputados presentó un punto de acuerdo para solicitar a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) revisar si está dentro de la legalidad la presa construida por el gobernador de Sonora, el panista Guillermo Padrés Elías, para dotar de agua a su rancho, donde sembró nogales.
El punto de acuerdo refiere que Padrés Elías construyó el embalse sin contar con los permisos necesarios. De esa manera se asegura de la dotación de agua, mientras el resto de los pobladores vecinos del rancho sufren por la sequía, considera.
Agrega que el mandatario estatal no ha especificado de dónde obtuvo dinero para la presa, pues “la opacidad, la corrupción y la falta de rendición de cuentas son el común denominador del gobierno de Sonora”.
La petición, presentada por Antonio Astiazarán, refiere que Padrés Elías realizó la obra para abastecer de agua a su rancho, de 3 mil 670 hectáreas y ubicado a cinco kilómetros de Bacanuchi, para la siembra y riego de nogal.
“La presa, que luce imponente y a la que los ejidatarios conocen como El Titanic, fue construida entre 2011 y 2012, sin el título de concesión que otorga la Conagua ni la autorización de manifestación de impacto ambiental de la Semarnat.”
Según la información disponible, agregó, Padrés Elías y su familia construyeron la obra sin título de concesión ni manifestación de impacto ambiental, a pesar de que es obligatorio, de acuerdo con las leyes de Aguas Nacionales y General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente.
“La construcción de la presa El Titanic y la perforación de seis pozos en el rancho Pozo Nuevo a partir de febrero de 2012 coinciden con la caída en el suministro de agua para el resto de los poco más de 200 habitantes de Bacanuchi, sobre todo en estos momentos, por la contaminación que están padeciendo el río Sonora y el propio río Bacanuchi”, expuso.
Ese rancho “está escriturado a nombre de Guillermo Padrés Elías, de su hijo Guillermo Padrés Dagnigo, de su hermano Miguel Padrés Elías y de su sobrino Miguel Padrés Molina”, apuntó Astiazarán.
Se trata, detalló, de un embalse de 120 metros de longitud y una cortina de 80 metros de altura, con capacidad para almacenar 4 millones de metros cúbicos de agua procedente del río Manzanal.
También “es deber de la Cámara de Diputados investigar y llegar hasta las últimas consecuencias en el caso para saber y determinar el origen de los recursos que el gobernador de Sonora utilizó para la construcción de la presa y las inversiones millonarias que ha realizado en los años recientes para modernizar el rancho Pozo Nuevo”.
