Claudia Guerrero y Claudia Salazar
Reforma
Cd. de México (03 julio 2014).- El Senado aprobó en comisiones, en lo general, la «reforma» secundaria en materia de telecomunicaciones. El dictamen fue aprobado por 25 votos a favor y 5 votos en contra.
Durante el debate, los legisladores fueron increpados por un grupo de jóvenes del Colectivo por el Derecho a la Comunicación (Codec). Los jóvenes intentaron dar lectura a un documento en el que pedían la excusa de ocho senadores y nueve diputados que pueden incurrir en presunto conflicto de interés. Sin embargo, fueron cercados y sacados por la fuerza del salón de sesiones, en medio de los gritos de senadores que se contradecían en el micrófono.
«¡Personal de seguridad, por favor háganse cargo!», exigió Lozano:
«Le pedimos al personal de resguardo que no haga uso de la violencia. No los saquen, nadie ha dado la instrucción de que saquen a nadie, no hagan uso de la violencia», gritaba Barrales.
Tras el incidente, Encinas llevó el tema a la tribuna y demandó a la Mesa Directiva revisar los protocolos del personal de seguridad.
En cuanto a la «ley» a aprobar, el PRI y el PVEM fueron los únicos grupos que votaron unidos, ya que la «reforma» dividió a los grupos parlamentarios del PAN, PRD y PT.
Durante el «debate», los legisladores expresaron posiciones encontradas sobre la definición de la preponderancia.
Un grupo de senadores manifestó su preocupación, tras afirmar que determinar la preponderancia por sector permitirá y fomentará la concentración en el mercado de la televisión.
«El proyecto es claramente protector de Televisa y la clave esencial se encuentra en la tramposa definición del concepto de preponderancia», dijo el panista Javier Corral.
«Esta pretensión tiene el propósito de proteger claramente a Televisa para dejarla libre de regulación en la televisión de paga, donde tiene más de 60 por ciento de suscriptores, sumada la televisión satelital y por cable».
La panista Marcela Torres Peimbert advirtió a los senadores que aprobar la reforma implica solapar un daño a la democracia, al permitir que el poder político, económico e ideológico se concentre en pocas manos.
«Invito a los senadores de mi partido a que no traicionen los ideales del PAN. No a los monopolios y sí a la competencia, no avalen con su voto este fraude a los mexicanos», demandó.
La senadora del PRD, Alejandra Barrales, aseguró que la reforma secundaria diluye y anula los avances logrados con los cambios realizados a la Constitución en 2013.
«La formulación de estas leyes secundarias es para muchos una oportunidad para desvirtuar, para anular, lo plasmado en nuestra Carta Magna el año pasado. Es lamentable que a un año de distancia, la reforma se diluye», señaló.
El senador Alejandro Encinas anunció su rechazo a la reforma y reveló que el Gobierno ni siquiera había cumplido con los cambios que negoció con su bancada.
«Por lo menos 60 modificaciones que se habían aceptado, 45 redactadas y 15 en previsión, no están incluidas en el proyecto que estamos discutiendo. Debe preocuparnos porque no sería la primera vez que, teniendo acuerdos, se da marcha atrás. Este dictamen profundiza la regresión», denunció.
El panista Ernesto Ruffo reprochó a los legisladores haber negociado el contenido de la reforma en acuerdo con la Presidencia, sin pensar en los ciudadanos.
«He visto ir y venir comitivas de compañeros legisladores a Los Pinos, y, en lugar de discutir las cosas aquí entre nosotros, las propuestas vienen desde allá», condenó.
El senador del PRD, Zóe Robledo, respondió a los señalamientos.
«Nosotros no iremos jamás a Los Pinos a negociar los derechos de absolutamente nadie. Si no hubiéramos intervenido en esa negociación, esta ley hubiera estado aprobada hace mucho, con una serie de regresiones gravísimas», aseguró.
Sin embargo, el propio perredista aceptó que la reforma no deja satisfecha a su bancada.
«Debemos verlo no como un paso final, sino como uno de los pasos iniciales en un largo camino de la reglamentación de sectores que por su muy alto dinamismo económico y tecnológico requerirán de nuevos ajustes», indicó.
Legisladores del PRI, PAN, PRD, PVEM y PT defendieron el contenido de la «reforma».
Consideraron que lograron importantes avances y que el contenido del dictamen se apega a lo que establece la Constitución.
Javier Lozano, presidente de la Comisión de Comunicaciones, afirmó la reforma debe valorarse a la luz del marco legal que está vigente y que requería de una actualización.
Elogió las participaciones del panista Roberto Gil y del perredista Armando Ríos Piter, quienes defendieron que se haya plasmado, de manera textual, la definición constitucional en materia de preponderancia.
En los posicionamientos, la presidenta de la Comisión de Estudios Legislativos, Graciela Ortiz, explicó que expedición de Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión, y de la Ley del Sistema Público de Radiodifusión de México, regula el espectro radioeléctrico y los recursos orbitales.
Aseguró que también regulará el uso de las redes públicas de telecomunicaciones, los servicios públicos de interés general de telecomunicaciones y radiodifusión, la convergencia y la competencia, así como los derechos de los usuarios, las audiencias y las facultades del nuevo órgano público de radiodifusión.
Por acuerdo de las comisiones, la discusión del dictamen en lo particular fue trasladada al pleno del Senado, que sesionará este viernes.
Para ello, este jueves, la Comisión Permanente deberá aprobar la realización de un periodo extraordinario.